La Audiencia Provincial de Gipuzkoa ha condenado a un total de 18 años de prisión al conocido como 'violador en serie' de Gipuzkoa por dos agresiones sexuales y una violación cometidas en los municipios de Andoain, Tolosa y Anoeta entre los años 2012 y 2013.
Se trata de la tercera sentencia contra este varón, de 39 años y de nacionalidad rumana, que fue juzgado por estos hechos el pasado mes de septiembre. El penado ya fue condenado a 12 años de cárcel por violar a una joven en Beasain en 2019 y también a 9 años de prisión por una agresión sexual a otra joven en 2015 en Lasarte-Oria.
En el primero de los casos, sucedido en agosto de 2012 en Andoain, se le condena como autor de un delito de agresión sexual a una pena de tres años de prisión, inhabilitación del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y abono de las costas.
Además, la Audiencia de Gipuzkoa le impone la prohibición de aproximarse a la víctima en un radio de 500 metros y de comunicarse con ella por cualquier medio durante cinco años. También le impone cuatro años de libertad vigilada y deberá indemnizar a la mujer con 12.000 euros.
En el segundo caso, ocurrido en la carretera que une las localidades de Tolosa y Anoeta en septiembre de 2012, el tribunal le condena también como autor de un delito de agresión sexual, "con la concurrencia de la agravante de aprovechamiento de las circunstancias de tiempo y lugar", a una pena de cuatro años de prisión, inhabilitación del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y abono de las costas.
Al igual que en la causa anterior, tendrá prohibido aproximarse a la víctima en un radio de 500 metros y comunicarse con ella por cualquier medio, en esta ocasión durante seis años. Además, le impone cuatro años de libertad vigilada.
Deberá indemnizar a la joven con 14.000 euros por "daño moral" y con 224 euros "por las lesiones sufridas", ya que la víctima fue arrastrada y sufrió un puñetazo en la mandíbula en el transcurso de la agresión. El acusado ha sido absuelto de un delito de robo con violencia.
En el último caso, ocurrido en el mismo lugar en septiembre de 2013, el tribunal le condena como autor de un delito de violación, "con la concurrencia de la agravante de aprovechamiento de las circunstancias de tiempo y lugar", a una pena de 11 años de prisión, inhabilitación del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y abono de las costas.
La Audiencia de Gipuzkoa le impone, asimismo, la prohibición de aproximarse a la víctima en un radio de 500 metros y comunicarse con ella por cualquier medio, en esta ocasión durante 13 años. Además, le impone 9 años de libertad vigilada.
Finalmente, deberá indemnizar a la víctima con 35.000 euros por "daño moral" y con 224 euros "por las lesiones sufridas". La joven fue arrastrada en esa zona entre Tolosa y Anoeta y el acusado usó cloroformo para anula su voluntad antes de violarla.