Gernika-Lumo
Que la feria agrícola del Último Lunes de Octubre es una jornada que mueve grandes cifras es algo bien sabido. Más si las previsiones auguraban un llenazo que finalmente se dió. Desde los expositores de la baserritarras –casi 300 puestos– a la asistencia de visitantes –125.000 nueva marca–, ayer todo fue colosal. Tan destacado como el volumen de las txosnas a la hora de preparar el plato estrella del día: el talo, aderezado con chorizo u otras viandas. Y, en el caso de Gernika Atletismo Taldea, nada menos que dos mil fueron los talos elaborados. Casi nada.
La preparación de las txosnas, que son regentadas por agrupaciones deportivas de Gernika-Lumo y están repartidas en el recorrido ferial –el de Gernika Atletismo Taldea se encontraba en plenomcogollo de la feria en la plaza de los Fueros–, no es un proceso nada fácil. Suele ir para largo y requiere de muchas horas de preparación. “No solo se trabaja un día, sino que es un proceso largo, desde el montaje hasta el desmontaje, la recepción de las bebidas, la organización de los trabajos y los turnos, la preparación de los talos...”, afirmaba Ibon Bilbao. “Un montón de curro”, incidía. “El trabajo que más se ve es el que realizamos durante la jornada del Último Lunes, pero hay bastante preparación por detrás”. Una preparación que queda oculta, “pero que es indispensable”. Y todo para unas horas, las que van desde bien entrada la mañana –“sobre las 7.00 horas ya hemos estado aquí para arrancar el día”, según señalaba Bilbao– hasta media tarde, “cuando ya empezamos el desmontaje. Suele ser el momento en el que ya empezamos a no tener tanta gente y aprovechamos. El objetivo es que el sitio quede tal y como ha estado, que se note lo menos posible que miles de personas han pasado por aquí”. Que, tras el preceptivo lavado de cara, el paso del Último Lunes de Octubre quede en nada.
A media mañana de ayer, cuando el hambre y la sed hacía aparición, alrededor de medio centenar de personas trabajaban codo con codo para que no faltara de nada. “A los chavales les tenemos haciendo talos sin parar, y los mayores son los que llevan la responsabilidad en la txosna”. Y más que de fuerza, los más jóvenes tiraban de maña para ir preparando poco a poco los talos. Fuera del espacio acordonado, la gente se arremolinaba sobre una txosna que bullía de actividad. “La ubicación también hace mucho. ten en cuenta que estamos en pleno centro ys e nota”. La actividad se veía desbordada en ocasiones, pero la txosna pudo ir solventando las peticiones de todos.
El duro trabajo siempre tiene su recompensa. Y para Gernika Atletismo Taldea, el Último Lunes de Octubre es un día para llenar sus arcas. “El dinero que recogemos este día lo utilizamos para cubrir el presupuesto anual o en lo que haga falta: sudaderas para los chavales, material y demás. Todo lo que savamos lo invertimos en el club”, ahondaba Bilbao, quien apuntaba que la experiencia es un grado. “Llevamos siete años montando la txosna y siempre hemos realizado un balance satisfactorio”. Así que, el año próximo, en 2023, confían en poder tener su txosna nuevamente. “Aquí estaremos”, vaticina Bilbao.