Enclavado en el norte de la Península, el territorio vasco-navarro es un epicentro de arte y cultura plagado de contrastes y de una belleza indiscutible. A lo largo de esta ruta nos encontraremos con su riqueza cultural y paisajística, mientras exploramos el legado artístico de uno de los escultores más icónicos del siglo XX. Desde sus monumentales esculturas al aire libre hasta las piezas más íntimas y reflexivas, nos preparamos para un recorrido en el que cada parada nos permitirá sumergirnos en el universo creativo de Jorge Oteiza.
Esculturas en Gipuzkoa
Comenzamos nuestro viaje en territorio guipuzcoano, concretamente en Donostia, siendo nuestro primer destino el Santuario de Arantzazu. Su fachada fue transformada por Oteiza en un símbolo de modernismo religioso. Se trata de un friso colocado en medio de las dos columnas principales del santuario donde se pueden observar las figuras abstractas y alargadas, un claro ejemplo de su capacidad para fusionar lo sagrado con la innovación artística.
Continuamos en Donostia con la intención de admirar una de las obras más representativas del escultor oriotarra, la Construcción vacía. Ubicada en el Paseo Nuevo, esta escultura geométrica y abstracta se alza frente al mar, dialogando con el paisaje natural. La interacción del vacío y el espacio en esta obra nos invita a reflexionar sobre la conexión entre el hombre, la naturaleza y el cosmos, un tema recurrente en la obra de Oteiza.
El espacio y el vacío, también en Bizkaia
Nos movemos hacia territorio vizcaino con intención de seguir descubriendo la esencia de Oteiza. Nuestra primera parada nos lleva al corazón de Bilbao, frente al Ayuntamiento, donde se encuentra la Variante ovoide de la desocupación de la esfera, una imponente escultura con formas curvas y una intrigante interacción de volúmenes. Al observarla, podemos apreciar cómo el artista juega con la idea del vacío como elemento fundamental de la composición, una técnica que busca desafiar nuestra percepción del espacio y la materia.
Una sensibilidad perceptible en Álava
Echamos un vistazo a territorio alavés, donde nos pasamos por Gasteiz, en busca del monumento Homenaje a Jesús Galíndez. Situado en un lugar de gran visibilidad, rinde tributo a la memoria del político y escritor vasco. La escultura refleja la profunda sensibilidad de Oteiza hacia las cuestiones sociales, capturada magistralmente por el artista a través de formas abstractas que simbolizan la lucha y la resistencia.
Avanzamos hacia el Museo Artium, también en Gasteiz, un edificio con una estructura arquitectónica única en la que gran parte del museo se encuentra bajo tierra. Comenzamos por los espacios exteriores donde encontramos expuestas algunas de las obras de Oteiza junto con algunas otras de Richard Serra y Eduardo Chillida, lo que nos vuelve a recordar su gusto por la interacción entre el volumen y el espacio. Dentro del museo, nos dirigimos directamente a la colección permanente Oteiza 1908-2003. The Collection. Esta exposición nos ofrece una visión comprensiva de su evolución artística, desde sus primeros trabajos hasta sus experimentos más vanguardistas. Las obras destacadas incluyen esculturas como Caja vacía y Construcción con tres cuboides vacíos, que son ejemplos emblemáticos de su búsqueda por desmaterializar la forma. Además, también descubrimos que el museo alberga archivos y documentos detallados sobre la trayectoria del artista oriotarra, por lo que se trata de una excelente fuente para cualquier aficionado que se interese por su legado.
Un museo dedicado a Oteiza en Navarra
Nos sumergimos en territorio navarro para seguir en busca del arte de Oteiza. Iniciamos en Pamplona con la Escultura retrato de un gudari llamado Odiseo. Esta obra, que mezcla lo mítico con lo histórico, simboliza la lucha, el viaje y la resistencia, por lo que nos hace reflexionar sobre la conexión entre el pasado mítico y la historia contemporánea.
Nuestros pasos nos llevan a la Escultura unidad triple y liviana, también en Pamplona. Esta pieza, con su estructura compleja pero equilibrada, demuestra la maestría de Oteiza en el manejo de formas y espacios. La obra nos enseña cómo elementos aparentemente separados pueden unirse en una composición armoniosa, reflejando la búsqueda de unidad y equilibro que caracteriza el trabajo del artista.
No podíamos finalizar el recorrido en otro sitio que no fuera la Fundación Museo Jorge Oteiza en Alzuza, muy cerca de Pamplona. Se trata de un espacio dedicado a la vida y obra de este escultor. Nada más llegar, nos encontramos con un edificio moderno y luminoso integrado en el paisaje circundante. Fue inaugurado en 2003 y alberga más de 1.650 esculturas, así como una amplia colección de dibujos, collages y escritos del artista.
Al entrar nos topamos con Caja metafísica, una escultura caracterizada por su estructura materialista y geométrica que parece flotar en el aire, creando un efecto de ligereza y dinamismo. Avanzamos hasta encontrarnos con Caja vacía con gran apertura, que forma parte de su serie sobre la desocupación del espacio, caracterizada por sus líneas limpias y su estructura abierta. Nuestros pasos nos llevan a la sección de obras monumentales, donde no nos podemos perder Propósito experimental, una estructura de hierro que es un excelente ejemplo del enfoque experimental de Oteiza, que siempre buscó desafiar las convenciones artísticas de su tiempo.
Oteiza en Biarritz
También visitaremos la majestuosa escultura Homenaje al caserío vasco situada en Biarritz. Una vez allí nos envuelve la fuerza y el simbolismo de la obra, que con sus líneas robustas y formas geométricas, nos invita a reflexionar sobre la rica tradición y el patrimonio cultural vasco. Una combinación entre la estructura metálica y el entorno rural que crea un contraste fascinante, que a su vez subraya la conexión entre la historia y la modernidad.
Así, terminamos nuestra andadura artística conmovidos por las espectaculares obras que hemos descubierto en numerosos rincones del territorio vasco-navarro. Sorprendidos por la poderosa conexión entre el arte y el entorno, y desvelados por la profunda espiritualidad y el innovador lenguaje que caracterizan a Jorge Oteiza, nos despedimos de un recorrido que no solo enaltece la mirada, sino que también invita a una profunda reflexión sobre el espacio, la forma y el vacío en nuestras vidas.
RECOMENDACIONES A TENER EN CUENTA
Para poder acceder al Museo Artium y a la Fundación Museo Jorge Oteiza es necesario adquirir la entrada para acceder a las instalaciones. En ambos es posible optar por distintas tarifas que se adaptan a las necesidades de cada visitante y en las que se encuentran disponibles visitas guiadas. En el caso del Museo Artium, la entrada es gratuita todos los días en horario de tarde y domingos todo el día, mientras que en el caso de la Fundación Museo Jorge Oteiza la entrada es gratuita todos los viernes salvo días festivos. Recomendamos revisar los horarios para no tener problemas en el momento del acceso.