El dueño de los perros que acabaron con la vida de una mujer de 27 años el pasado lunes en la localidad zamorana de Roales se encuentra en libertad, pero como investigado por un supuesto delito de homicidio imprudente. Así lo confirmó ayer la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, que señaló que el hombre, residente en el pueblo vecino de La Hiniesta, “se ha acogido a su derecho a no declarar”.
La delegada del Gobierno añadió, en relación a este asunto, que las diligencias aún se prolongarán durante unos días, con el fin de que la Guardia Civil pueda llevar a cabo las investigaciones oportunas. Entre el trabajo de los agentes en estos momentos, se encuentra “la debida búsqueda” de otro de los perros de más corta edad, en concreto un cachorro de seis meses de careo que no tenía chip, cartilla ni vacuna, según confirmó más tarde la Delegación del Gobierno. Barcones subrayó las dificultades para encontrar al animal, ante su tendencia a escapar de las personas, aunque dejó claro que las pesquisas continúan.
Mientras tanto, el resto de los perros “están debidamente custodiados, esperando la oportuna orden para poderlos trasladar a la perrera municipal”. Los animales se hallan aislados, según marca el protocolo previsto para estos casos. Barcones respondió de igual modo a algunas cuestiones relacionadas con otros supuestos ataques de estos perros a viandantes y ciclistas que pasaban por la zona: “Conforme a la información que me remite la Guardia Civil, no consta ninguna denuncia ni ninguna actuación sobre estos animales”, señaló la delegada. Ahora bien, en 2016 sí que se produjeron dos denuncias relacionadas con este propietario “que correspondían a otros animales diferentes, pero que eran también perros que protegían el ganado”.
El grupo de perros que cuidaba a una ganadería de ovino de La Hiniesta y que atacó a la joven el pasado lunes en un camino de la localidad vecina de Roales del Pan estaba integrado por tres mastines adultos y cuatro perros de carea, dos de ellos cachorros de un mes y otro un ejemplar que ya había cumplido los seis meses de vida.
La víctima, de 27 años, paseaba el lunes por un camino de concentración entre Roales del Pan y La Hiniesta cuando en ese último término municipal, sobre las seis y veinte de la tarde, fue atacada por los perros de pastoreo de una ganadería de ovino que le causaron mordeduras mortales.
La madre de la joven fue la que se encontró el cuerpo después de que, al parecer, la avisara telefónicamente de que se acercaban a ella unos perros e iban a atacarle.