En torno a 60 profesionales de la salud reciben la insignia de oro de la Academia de Ciencias Médicas en la Sociedad Bilbaina

ES una de las grandes minas de la salud de esta tierra, un yacimiento donde se procede a la excavación en pos de la vitalidad, la energía y la salubridad. Les hablo de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao que preside Ricardo Franco Vicario y que ayer vivió una ceremonia de celebración en la Sociedad Bilbaina, institución que preside Juan Goiria, donde ayer encontraron vetas de plata y oro, metales nobles con los que están hechas las insignias entregadas en la media tarde.

Digamos que fue una cita cargada de conocimiento científico, destreza técnica y habilidades para los cuidados de la salud. Fue todo un estallido de saludos, reencuentros y felicitaciones en el que se entregaron insignias de oro a casi 60 personas académicas que han formado parte de la entidad cuando menos durante cuatro décadas. Entre ellos se encontraban Valentín Achotegui, Luis Alciturri Imaz, Ángel Barturen, Santiago Burón, Alfonso Cenicacelaya, María Victoria Egurbide, Begoña Escuza, Ginés Galdón, Gabriel Inclán, José Luis Isasi, Guruzne Kareaga, Alberto López de Ocáriz, Ander Mezo, Florencio Moneo, José Luis Neyro, Itziar Olabarria, Guillermo Olaizola, José Antonio Romillo, Pedro T. Sagazola, Jesús Mari Terrones, José Antonio Vicandi, Amaya Villanueva y Rafael Zalacaín y otra buena gente de largo recorrido que siguieron con emoción una ceremonia conducida por Gorka Pérez Yarza, secretario general de la Academia, y Agurtzane Ortiz. Para dar la bienvenida a las personas elegidas como nuevos presidentes de sección tomó la palabra Alberto Martínez, cuyo discurso siguieron con ilusionada atención Paloma Liendo (Análisis Clínicos), Alain Laskibar (Cardiología), Gontzal Tamayo (Emergencias, medicina crítica y politraumatismos),Yolanda García (Endocrinología), Agurtzane Ortiz (Euskera y plurilinguismo), Naiara Fernández Gutiérrez, de Igurco, (Geriatría); María Luisa Arteagoitia (gestión y calidad asistencial), Iñigo Arroyo (Jóvenes - MIR), Isabel Urrutia (Neumología), Silvia Taramundi (Neurofisiología), Nerea Martínez Alday (Oftalmología), Arantza Ibargutzi (Otorrinolaringología- SVOL), José Luis Neyro (Relaciones con Hispanoamerica), José Gregorio Pereira (Urología) y Fernando Loidi (Valoración del daño corporal).

Cuánta sabiduría, cuánto conocimiento en los salones de la Sociedad Bilbaina. Iban y venían los presentes. Entre ellos se encontraba la mayor parte de la Junta de Gobierno de la Academia; Flavia Erazo, presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Bizkaia; Isabel Tejada, presidenta del Colegio Oficial de Biólogos de Euskadi; Agurtzane Meruelo, presidenta del Colegio de Dentistas de Bizkaia; Álvaro Mateos Amann, presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Bizkaia, y Milagros López de Ocáriz, presidenta del Consejo de Farmacéuticos del País Vasco, Juan José Zarranz, Elixabete Undabeitia, Franciso Dehesa, Mikel Sánchez, Juan Uriarte, Enrique Hermida, Elena Suárez o nuevos académicos como Carlos Elías, Monike de Miguel, Eneko Fernández, José María Garrido, Jon Gil, Aranzazu Gimeno, María Begoña Girbau, Juan José Gómez, Xiomara Gutiérrez, Ania López de Eguinoa, Laura Lozano, Silvia Marce, Alberto Martínez, Jorge Alberto Mora, Marian Municio, Enrique Ornilla, Darío Pérez, Cristian Pérez de la Fuente, Ángel San Miguel, Gorka Sánchez o Amparo Villasante entre otros.

Fue, como les digo, una tarde rellena de salud, como si fuese uno de esos dulces de media tarde que tanto complacen a los paladares exigentes. Hubiesen preferido poder llevar invitados y gente cercana a la celebración pero con tanta gente reconocida no había manera de meter más gente en el duro imperio de la pandemia. Tanta emoción se alivió con la actuación, a medio camino, del dúo cómico Bocabeats, todo un hallazgo.