Endesa obtuvo un beneficio neto de 1.404 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que representa un incremento del 32,6% con respecto al mismo periodo del ejercicio pasado, informó la compañía, que encamina así sus objetivos para 2024.
Los ingresos de la eléctrica en el periodo de enero a septiembre alcanzaron los 15.765 millones de euros, lo que supone un descenso del 17,9% frente a los 19.211 millones de euros de hace un año.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de Endesa a cierre de septiembre se situó en los 3.881 millones de euros, con un aumento del 15,7%.
El resultado ordinario neto del periodo enero-septiembre ascendió a 1.376 millones de euros, lo que supone un aumento del 29,9% frente a los 1.059 millones de euros obtenidos en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Este impulso en sus resultados a cierre de septiembre se vio respaldado por la aportación positiva de todas las líneas de negocio. Tanto las que operan en el mercado liberalizado (Generación y Comercialización, que suman 425 millones con un alza interanual del 20%) como en el regulado (Distribución, con un alza del 7% tras aportar 102 millones más que en 2023).
Este comportamiento positivo se explicó fundamentalmente por esa evolución del Ebitda, en especial en el negocio del gas que se ha recuperado de la compleja situación de mercado vivida en 2023.
De esta manera, la energética reafirmó que se encuentra en una situación cómoda para alcanzar el rango alto de los objetivos fijados para el conjunto de 2024, que pasan por cerrar el año con un Ebitda de entre 4.900 y 5.200 millones y un resultado ordinario neto de 1.600-1.700 millones.
Inversiones de 1.300 millones
En lo que respecta a las inversiones, alcanzaron los 1.300 millones de euros en los nueve primeros meses, absorbiendo redes y renovables más de dos tercios del total.
Así, Endesa tiene operativos 10.100 megavatios (MW) de potencia renovable -hidroeléctrica, solar y eólica- en la Península, 800 MW más respecto a final de septiembre de 2023.