El alcalde de Donostia, Eneko Goia, ha querido salir al paso ante ciertas informaciones publicadas en algunos medios que aseguraban que la capital guipuzcoana e Irún van a cobrar multas de hasta 200 euros por circular con el coche por el centro urbano a partir del año 2023.
El regidor donostiarra recuerda que existe una ley estatal que obliga a aquellos municipios con más de 50.000 habitantes a establecer zonas de bajas emisiones. Sin embargo, Goia subraya que el borrador que se ha pasado a los municipios es una simple propuesta, y no una ordenanza ya impuesta. "No está determinado en este momento", aclara el alcalde.
Las informaciones publicadas aludían a la reunión de expertos en movilidad reunidos estos días en Irún para ultimar una ordenanza tipo que regulará las zonas de bajas emisiones a partir del próximo otoño en base a esta ley de bajas emisiones.