Cada segundo jueves de marzo, desde el año 2006, se celebra el Día Mundial del Riñón. La Sociedad Internacional de Nefrología y la Federación Internacional de Fundaciones Renales instauraron esta efeméride para crear conciencia y promover así la detección precoz de cualquier padecimiento en los riñones. Este 2024, la jornada se celebra con el lema: "Promover el acceso equitativo a la atención y la práctica óptima de medicamentos".
Aunque no lo parezca, el 10% de la población mundial sufre de alguna enfermedad renal crónica. El problema de estas dolencias es que no nos damos cuenta hasta que están bastante avanzadas, ya que no suelen presentar síntomas. Lo explicaba en Onda Vasca con Txema Gutiérrez el doctor Iñaki Minguela, jefe del Servicio de Nefrología en el Hospital de Basurto: "La enfermedad renal crónica está oculta, porque da pocos síntomas hasta que no está muy avanzada. Además, estamos viendo un aumento de casos, porque se asocia a varias patologías muy prevalentes como son la diabetes, la hipertensión y la obesidad, que son también enfermedades silentes y que, si no se controlan exquisitamente bien, nos pueden afectar al riñón".