El congreso extraordinario de ERC Barcelona convocado este jueves para decidir si los republicanos entran a formar parte del gobierno municipal de Jaume Collboni (PSC) ha sido suspendido al no contar el espacio reservado con el aforo suficiente para acoger a todos los militantes que han asistido.
A las 19.45 horas, cuando pasaban 45 minutos de la hora fijada para el inicio del encuentro y con largas colas todavía formadas ante el Orfeó Martinenc, miembros de la ejecutiva del partido en Barcelona han comunicado a los militantes que el congreso queda suspendido sin que se haya fijado por el momento otra fecha, según ha podido comprobar EFE.
La sala tiene un aforo máximo de unas 275 personas, mientras que los militantes del partido superan el millar, según fuentes de la formación en Barcelona. Solo se podía votar presencialmente.
Los acuerdos en el Parlament, claves para la movilización de militantes
El contexto actual ha dotado a esta votación de una trascendencia especial, dado que los 20 diputados de ERC en el Parlament también son clave para hacer presidente de la Generalitat al socialista Salvador Illa, lo que en este proceso puede haber movilizado a más militantes de lo esperado.
El congreso, en el que se debía votar un preacuerdo entre el grupo municipal de ERC y los socialistas, lo convocó la ejecutiva de los republicanos en Barcelona el pasado martes por la noche.
La dirección del partido en Barcelona, a diferencia de buena parte de los miembros de la ejecutiva nacional, quiere culminar un camino iniciado en marzo, cuando el grupo municipal alcanzó un pacto presupuestario con el PSC, lo que abrió la puerta a una posterior entrada en el ejecutivo de Collboni que finalmente no se dio a causa del adelanto electoral en Catalunya.
El principio de acuerdo entre republicanos y socialistas "contempla que ERC gestione responsabilidades de gestión en áreas clave para los republicanos, como la lengua catalana, juventud, turismo, promoción económica, derechos sociales, proyección de ciudad, gente mayor o calidad urbana", explicó el martes la formación en una nota de prensa.
En el mismo comunicado, ERC Barcelona apuntaba que ha querido "ser protagonista de la ciudad y de la acción en el Ayuntamiento desde el inicio del presente mandato" y que por ello "ha organizado diversos encuentros y debates en 'casales' en los que la militancia republicana debatió sobre el diagnóstico actual de la ciudad y la estrategia municipal de futuro".
Señalaba que ha alcanzado dos preacuerdos: uno para un "programa de gobierno conjunto y progresista" y otro sobre la "nueva composición" del ejecutivo municipal.
Fuentes de la dirección en Catalunya habían apuntado que se "respetará el proceso de deliberación y decisión" en Barcelona, si bien anticipaban que "una vez se conozca la decisión final y tras ver qué acuerdos se generan, la dirección nacional valorará el resultado".
Entre los militantes que han asistido a la cita se han contado a los consellers en funciones Joan Ignasi Elena, Ester Capella, Natàlia Mas o Natàlia Garriga, así como a Ernest Maragall, exlíder en Barcelona.