A pesar de haber quedado opacada en las últimas semanas por las controversias con Argentina e Israel, y por las vueltas que están dando el caso Koldo y la investigación abierta a Begoña Gómez, la cuestión catalana volverá hoy al primer plano de la actualidad con la previsible aprobación definitiva de la ley de amnistía por parte de la mayoría de la investidura en el Congreso, donde regresará después del veto que sufrió en el Senado por la mayoría absoluta del PP.
ERC se encargó de calentar ayer miércoles esta cita reafirmando su posición de que la “próxima parada” tras la aprobación de esta norma será el “referéndum”. Así lo avanzó el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, quien añadió que “nadie se lo tiene que tomar como un desafío, como una amenaza, aunque lo calificarán” de este modo, ya que, recordó, el referéndum está en su programa.
En declaraciones a los medios en los pasillos del Congreso, añadió que ERC considera que esta medida es la “solución” adecuada para el conflicto político en Catalunya, donde según él, hay “dos millones de personas que quieren votar por el estatus político”. “Hay gente que quiere votar y gente que quiere votar no a la independencia, creo que hay que dar el vehículo para ello y nuestra propuesta es votar, tan simple como eso”, apostilló.
En cualquier caso, el debate se prevé bronco de nuevo en la Cámara baja merced al asunto que se someterá a votación. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, defenderá el no de su formación a la ley de amnistía, una norma que en el trámite del Senado los populares calificaron como “obscenidad” y “fraude democrático”, y que ya han anunciado que recurrirán ante el Tribunal Constitucional.
Mesa del Parlament
Del futuro de la ley de amnistía están pendientes los líderes independentistas procesados, es el caso de Carles Puigdemont, que tiene en su agenda un posible regreso a Catalunya tras haber establecido su residencia en Waterloo (Bélgica) en 2017, en el momento álgido del procés. El expresident concurrió como cabeza de lista de Junts en las elecciones catalanas del pasado 12 de mayo, y otro frente por resolver es el de la gobernabilidad en esa comunidad.
Ayer miércoles, el ganador de esos comicios, el líder del PSC, Salvador Illa, advirtió de que se va “por el mal camino” si los partidos no “respetan” el resultado “claro y contundente” del 12-M en la conformación de la Mesa del Parlament.
Fue respondido por el secretario general de Junts, Jordi Turull, quien le acusó de utilizar “los mismos argumentos de Feijóo contra Sánchez” de cara a reclamar su derecho a presidir La Moncloa, al tiempo que le reprochó su pacto con el PP para “arrancarle la alcaldía de Barcelona a Xavier Trias”.
ERC advirtió por su parte que separará las negociaciones para la elección de los miembros de la Mesa del Parlament, que debe constituirse el 10 de junio, de las conversaciones para la investidura del nuevo president.