Vida y estilo

Eres vasco si tienes esta cicatriz en el brazo, un farmacéutico lo explica

Los nacidos en Euskadi comparten esta seña de identidad que se mantuvo durante generaciones y que no tienen en el resto del Estado
Eres vasco si tienes esta cicatriz en el brazo, un farmacéutico lo explica / Pixabay

Es posible que alguna vez te hayas preguntado sobre esa cicatriz redonda en tu hombro, una marca que lleva consigo una historia particular y, en muchos casos, un indicativo de tus orígenes. Para aquellos nacidos en Euskadi o en países de Latinoamérica, esta pequeña cicatriz es un testimonio de una práctica médica que estuvo en vigor durante décadas.

El farmacéutico Álvaro Fernández, conocido como @farmaceuticofernandez en redes sociales, ha arrojado luz sobre el significado de esta cicatriz, que muchas veces pasa desapercibida, pero que encierra una historia de salud que conecta a generaciones. Su explicación ha capturado la atención de millones de personas en internet, revelando por qué esta marca es tan común entre quienes nacieron en Euskadi o en otras partes del mundo.

La cicatriz de la vacuna BCG: un testimonio del pasado

Álvaro Fernández ha utilizado sus plataformas digitales para explicar un detalle que podría parecer insignificante, pero que tiene una gran relevancia histórica y geográfica. La cicatriz, que suele aparecer en el brazo de quienes la poseen, es el resultado de la administración de la vacuna BCG, una inmunización diseñada para combatir la tuberculosis, una enfermedad que en su momento representaba una amenaza significativa para la salud mundial.

La vacuna BCG, desarrollada por Albert Calmette y Camille Guérin, comenzó a aplicarse en 1921 y su uso se extendió a nivel global, especialmente en regiones con alta incidencia de tuberculosis. En la mayoría de los casos, la cicatriz se produce debido a la manera en que se administra la vacuna: la aguja penetra justo debajo de la piel, sin alcanzar el músculo, lo que provoca una reacción cutánea que, tras sanar, deja una marca permanente.

Fernández ha explicado que, aunque en la mayor parte de Estado la vacunación con BCG se suspendió en 1980, en Euskadi la práctica continuó. Esto se debió a las particularidades epidemiológicas de la región, que llevaron a las autoridades sanitarias a mantener la vacunación como medida preventiva. Por lo tanto, quienes nacieron en Euskadi después de 1980 y hasta mediados de los años 2000 es probable que tengan esta cicatriz, que actúa como un sello de identidad para muchos vascos.

La retirada de la vacuna en el Estado y su permanencia en Euskadi

El cese de la vacunación BCG en gran parte del Estado en 1980 marcó un hito en la historia de la salud pública. Este cambio se produjo tras una evaluación exhaustiva de la situación epidemiológica. Para ese entonces, las tasas de tuberculosis habían disminuido considerablemente en muchas regiones, gracias a los avances en medicina y a la mejora de las condiciones de vida.

La vacunación masiva ya no se consideraba necesaria en la mayor parte del Estado, y la BCG fue eliminada de la cartilla de vacunación infantil. Sin embargo, en Euskadi se consideró necesario continuar con la inmunización durante más tiempo, como una medida preventiva.

Euskadi suspendió la vacunación contra la tuberculosis con BCG en recién nacidos en 2013. Sin embargo, en 2023 se volvió a reintroducir en menores de 5 años con factores de riesgo.

31/08/2024