Ertzaintza y policías locales editan un decálogo contra los pinchazos

La Ertzaintza y las policías locales de Euskadi han instado a las víctimas de pinchazos que se sientan indispuestas a contactar con el Servicio de Atención de Emergencias SOS Deiak 112 y a acudir “lo antes posible” a un centro hospitalario. El departamento vasco de Seguridad hizo públicas ayer una serie de recomendaciones de la Ertzaintza y las policías locales ante un posible pinchazo, tras las denuncias que se vienen sucediendo este verano de casos ocurridos en entornos festivos y de ocio nocturno.

“Si sientes un pinchazo o escozor en alguna zona de tu cuerpo y te sientes indispuesta”, se recomienda comunicarlo “de inmediato al entorno más próximo y solicitar ayuda”. Asimismo, se insta a contactar “al mismo tiempo” con el Servicio de Atención de Emergencias SOS Deiak 112 para comunicar lo ocurrido.

De esta forma, según se explica, el caso será notificado a la Ertzaintza o a las policías locales para que puedan contactar con la víctima y recabar “datos objetivos” que ayuden a esclarecer lo ocurrido e identificar a sus autores. Se pide, igualmente, que se acuda “lo antes posible” a un centro hospitalario para realizar un examen médico completo “con el fin de detectar o descartar posibles sustancias” en el organismo.

Desde el Instituto Vasco de la Mujer, por otro lado, recuerdan que es clave la existencia de puntos de información donde se pueda atender de manera inmediata a una mujer que haya podido ser víctima de alguna agresión machista.

En caso de que se decida poner en marcha algún otro teléfono de información y atención a nivel local recomienda que la persona que los atienda esté preparada para dar una respuesta oportuna y rápida, teniendo claros los recursos a los que puede recurrir para asegurarse de que la víctima está bien atendida. Además, el número telefónico y la ubicación del punto de información “deben ser difundidos previamente y debe asegurarse que en todos los bares y txosnas tienen esa información”.

Emakunde insiste en que es muy importante también “asegurarse de que la o las personas involucradas en esta tarea tienen el manejo suficiente de las orientaciones para actuar en estos casos”.

“Todo el colectivo involucrado en las fiestas debe tener clara su tarea, la manera de comunicarse, los teléfonos o correos que servirán para esta comunicación, y, en general, todos los procedimientos necesarios para que funcione la red de apoyo a las víctimas”, añade.

Respetar su decisión

Emakunde hace hincapié en que la decisión de lo que debe hacerse es siempre de quien ha sufrido la agresión. “Si es mayor de edad, hay que prestarle información, asegurarse de que está bien y de que llega bien a casa y respetar su decisión”, apunta.

Recuerda que no denunciar en un primer momento no significa que no haya sufrido una agresión y que “no pueda haber una respuesta de la ciudadanía de rechazo a las agresiones machistas, protegiendo siempre la intimidad de las víctimas y recordando las causas generales de las agresiones y su función de control”.

Finalmente, Emakunde señala que en las fiestas también hay chicas menores de edad que pueden sufrir agresiones machistas y chicos menores que pueden cometerlas. En estos casos advierte de que hay que proteger la identidad tanto de la víctima como de los agresores y contactar con sus respectivas familias.