Elegir bien el momento en el que pones en venta una propiedad es clave para resolver la operación de la mejor manera posible, ya sea si la motivación de la venta es para comprar una vivienda nueva o para resolver una situación de copropiedad procedente de un divorcio o una herencia.
Las razones que pueden llevarte a querer colgar el cartel de 'se vende' en una propiedad son muy diversas, por eso, si los motivos por los que pones en venta el inmueble pueden esperar a tener una situación de oferta y demanda ideal, nunca está de más que analices la situación del mercado, que es una de las variables que más peso tienen en las condiciones de la operación.
El mercado inmobiliario español cerró 2021 con la la mayor cifra de compraventas de inmuebles desde el año 2007, y en el primer trimestre de 2022 se mantuvo la misma dinámica, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que reportó unos datos de 53.623 compraventas en el mes de febrero, una cifra récord que no se veían desde abril de 2008.
Un vendedor y un comprador hacen efectivo el intercambio de llaves.
Sin embargo, desde febrero ha habido multitud de imprevistos a los que se está enfrentando el sector inmobiliario: la guerra de Rusia y Ucrania, que está desestabilizando la economía europea, incremento del precio de las materias primas, crisis energética, una inflación histórica, falta de suministros desde el estallido de la pandemia, subida del Euríbor y de los tipos de interés, que encarecen aún más el precio de las hipotecas.
Ante este escenario, en el que influyen multitud de variables y a priori ninguna positiva para el mercado inmobiliario, cabe preguntarse sobre la idoneidad del momento para la venta desde el punto de vista de un propietario.
¿Vendo en este momento?
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) es tajante y dice que sí, estamos ante un buen momento para vender porque "la inercia compradora es importante", lo que está generando que en lo que llevamos de 2022 los precios del mercado inmobiliario presenten una tendencia al alza. De hecho, en los seis primeros meses de 2022 se vendieron un 23% más de viviendas que en 2021, y un 24% más que en 2019, el último año sin pandemia.
En cualquier caso, según el Índice Inmobiliario Fotocasa y Pisos.com, el precio de la vivienda en España fue de 1.951 euros por metro cuadrado en agosto de 2022, marcando una subida del 0,95% con respecto al mes anterior y un 5,26% frente a agosto de 2021. Es decir, la tendencia alcista de los precios se sigue manteniendo, por lo que ahora mismo sería una buena ocasión para sacar la máxima rentabilidad a un inmueble.
Los motivos que llevan a esta situación es que existe una gran escasez de oferta, tanto de inmuebles de segunda mano como de obra nueva, y, a su vez, hay mucha demanda. A ello debemos añadir que los potenciales compradores están más dispuestos a invertir en una vivienda que les interesa tras la situación de la pandemia.
Por todo esto, los expertos de Fotocasa prevén que, de media, se tarde menos de lo habitual en vender un inmueble y por un precio más alto.
Hace un año cerrar una operación de este tipo costaba, de media, unos nueve meses, ahora puede que se tarde unos seis o siete. Aunque vender una vivienda en grandes ciudades puede llevar poco más de un mes, apuntan desde el portal Fotocasa.