“Es en el medio-largo plazo donde puedes valorar a un entrenador”

Su vida siempre ha estado estrechamente ligada al fútbol. ¿Qué despertó esa pasión?

Yo creo que es algo que es innato. Por lo que me cuentan mis padres, yo siempre estaba, desde muy pequeñito, obsesionado con los balones, y desde que me puse en pie empecé a darle patadas al balón. Es algo que me ha acompañado siempre. Siempre he estado jugando al fútbol, desde pequeño, con mi padre por casa. Mi madre me echaba la bronca por jugar en casa (risas). Yo pienso que viene conmigo desde la cuna.

O sea que es una afición compartida entre padre e hijo.

Mi padre es muy futbolero. Fue mi entrenador antes de que me fichara el Real Madrid con 14 años. Así que sí, mi padre es muy futbolero. Fue futbolista amateur también. 

¿Recuerda el primer partido que vio?

Del primer partido que vi no tengo el recuerdo, pero te puedo decir el primer partido del que tengo un recuerdo claro y que viví con pasión, que fue el 12-1 de España-Malta. Debía de tener siete años, como mucho. Es el primer partido que recuerdo haberlo visto, muy emocionante. 

De esos que se quedan marcados.

Sí, sí, un partido inolvidable. 

En ese sentido, ¿qué cree que tiene el fútbol que engancha tanto?

Es algo difícil de explicar. Es un deporte absolutamente impredecible, el único que se juega con el pie, lo que hace que sea muy llamativo y muy complejo de dominar, porque yo creo que estamos como seres humanos hechos para dominar las cosas con las manos, pero no con los pies. Además, es un deporte que tiene muy poco tanteo, con lo cual es muy fácil que se produzcan sorpresas, y que haya muchos caminos para llegar a la victoria. Se dan muchas cosas que creo que lo hacen el deporte más emocionante por lo que te he dicho, que es el más impredecible, el que puede cambiar en décimas de segundo porque tiene un tanteo muy bajo y hace que pueda haber muchas más sorpresas que en cualquier otro deporte. 

Ahora ha llegado a Movistar Plus+ con El Míster. ¿Cómo está siendo esta nueva aventura para usted?

Me dieron la posibilidad de hacer un programa y yo propuse un formato de este tipo, que fuera a adentrarnos un poco más en el mundo del entrenador, que creo que es bastante desconocido. Con todos los años que se lleva de fútbol, no se conoce lo que implica el trabajo de un cuerpo técnico y de un entrenador de élite, por ejemplo en estos casos, que es lo que estamos abarcando. De ahí surge la idea y nos metimos de lleno en darle forma. El programa acaba de arrancar, e iremos puliendo poco a poco el formato y viendo hacia dónde caminamos. Estamos muy contentos con el resultado del primer programa. Además, estoy en las mejores manos, porque estoy con gente que ha hecho por ejemplo Informe Robinson. O sea que estoy en unas manos extraordinarias. De momento el feedback que estamos recibiendo también es extraordinario, pero yo, que soy muy exigente, quiero pulirlo más, que sea un programa único que no se haya hecho, contar cosas que no se han contado dentro del mundo entrenador.

Es interesante la premisa. Porque a veces nos olvidamos de que tras los éxitos de un equipo está también el cuerpo técnico. ¿Siente que a veces se les culpa de cosas que escapan a su control?

Sin duda. El entrenador tiene que intentar darle las mayores herramientas posibles al equipo para estar cerca de ganar. Nunca te aseguras ganar, ni aunque hayas preparado todo y hayas atado cualquier detalle minuciosamente. También es lo bonito que tiene el fútbol, que al final depende de un error humano, del acierto, hasta de una decisión arbitral que pueda ser sujeta a una interpretación. Tanto para un lado como para el otro. Creo que cualquier circunstancia negativa que sucede en el verde se responsabiliza al entrenador, aunque no haya tenido mucho que ver, y a veces sucede hasta en lo positivo; que a veces haces un cambio y ese jugador sale y te cambia el partido y oyes “cómo lo leyó” o “hizo el cambio perfecto”. En el medio-largo plazo es donde puedes valorar realmente a un entrenador, porque en el corto plazo en el fútbol hay muchos accidentes, muchas cosas que pueden pasar que escapan al control del entrenador.

La primera visita del programa se la hizo a Mauricio Pochettino. ¿Cómo fue su e encuentro con él?

Superando las expectativas más optimistas, porque tanto Mauricio como su cuerpo técnico nos abrieron su corazón, su mente y su casa. Estamos muy agradecidos porque la amabilidad y el trato humano fue maravilloso. 

¿Con qué anécdota se queda de esta entrevista?

La verdad es que me quedo con muchas. Tengo varios ejemplos. El primero, el mito de la experiencia, porque él llega al Espanyol sin haber entrenado en ningún sitio, y tiene efecto inmediato. El hecho de la valentía de irse a Inglaterra sin hablar inglés y tener éxito inmediato. Me quedo también con el hecho de llegar a una final con el Tottenham por primera vez en la historia del club, preparar todo y que a los veinte segundos te hagan una mano. Todas estas cosas me parecen muy interesantes.