El plátano es un alimento sano, rico en antioxidantes y bajo en grasas, con un agradable sabor dulce, muy versátil y con nutrientes esenciales para el organismo como son el potasio, el manganeso o las vitaminas C y B6. Por todo ello, se presenta como una buena opción para formar parte de la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de tomar 5 raciones diarias de frutas y verduras.
Pese a sus bondades, como cualquier alimento, hay que tomarlo con moderación, ya que un consumo excesivo de esta fruta podría resultar perjudicial para el organismo. Los expertos recomiendan que las personas sanas no coman más de dos plátanos diarios y, además, que se compensen sus déficits nutricionales en proteínas, grasas saludables, calcio, vitamina D o hierro con otros alimentos que los contengan.

El plátano es la segunda fruta más consumida por detrás de la naranja.
Beneficios
Los principales beneficios del consumo moderado de plátano son:
- Salud intestinal
El plátano es rico en fibra, lo que favorece los procesos digestivos y el tránsito intestinal. También contiene almidón resistente, un buen ingrediente para las bacterias buenas que hay en tu intestino.
- Salud cardiovascular
El plátano, también como fuente de fibra, protege el corazón de enfermedades coronarias y cardiovasculares. Tiene un alto contenido en potasio, mineral que genera en tu cuerpo una pequeña carga eléctrica (electrolito) que hace que los músculos del cuerpo, entre ellos el corazón, se contraigan y se regulen sus latidos. Además, contrarresta los niveles de sodio y previene la hipertensión.
- Vista
El betacaroteno del plátano, principal fuente de vitamina A, protege los ojos, mantiene la vista en buen estado y mejora la visión nocturna.
- Piel
Al ser rico en minerales antioxidantes, el plátano hace que tu piel luzca sana y tersa. En el caso del manganeso, aumenta los niveles de colágeno que mantiene tu piel en buen estado y favorece la recuperación del acné, las arrugas o la piel seca.
- Eliminación de líquidos
El potasio del plátano regula la cantidad de agua en nuestro organismo, lo que nos ayuda a combatir la retención de líquidos.
- Memoria
El plátano contiene potasio, magnesio y vitamina C que cuidan la memoria, así como vitamina B6, que produce serotonina, nerepinefrina y dopamina, transmisores que ayudan a la concentración.
- Energía
Al hacer deporte, tu cuerpo necesita más energía y consume más glucógeno. El almidón del plátano se convierte en azúcar libre y se metaboliza con rapidez, por lo que resulta muy útil para deportistas de alto rendimiento. Su alto contenido en potasio hará que tus músculos funcionen perfectamente. En tu vida diaria, consumir plátanos contribuirá además a que te sientas fuerte y vigoroso, y evitarán la fatiga crónica.

El consumo de plátano antes de hacer deporte proporciona una buena dosis de energía.
¿El plátano engorda?
Uno de los mitos más comunes es que el plátano engorda; sin embargo, hay nutricionistas que sugieren que, además de no engordar, esta fruta puede incluso ayudar a perder peso.
Al ser una fruta saciante con un alto contenido en fibra, evita picotear entre horas. Los plátanos, además, son relativamente bajos en calorías (unas 90 kcal por cada 100 gramos), una opción muy saludable para cuidarse.
En cuanto al azúcar, el hecho de que el plátano maduro contenga más azúcares que verde tampoco significa que engorde más. Aunque el almidón es el hidrato de carbono con más presencia en el plátano, a medida que madura "se convierte en azúcares sencillos como glucosa, sacarosa y fructosa", saludables para el organismo, explica la Fundación Española de la Nutrición (FEN).
¿Se debe consumir por la noche?
Los nutricionistas niegan que el mero hecho de comer un plátano por la noche pueda contribuir a un aumento de peso, ya que sostienen que este está más relacionado con el balance calórico total de todo el día que con el momento de consumirlo.
Lo cierto es que tomarlo después de cenar es una buena opción para combatir el insomnio y disfrutar de un sueño de calidad. Esto se debe a tres de sus componentes: triptófano (un aminoácido precursor de la serotonina, que reduce la ansiedad), magnesio (un mineral que promueve la actividad eléctrica del cerebro durante el sueño profundo) y potasio (un oligoelemento fundamental para la relajación musculoesquelética).
Salvo en el caso de que cenes muy tarde y justo antes de acostarte (algo que ni los nutricionistas ni los médicos especialistas en sueño recomiendan), en cuyo caso sería mejor tomar algo más ligero, cualquier hora es buena para degustar un sabroso plátano.