El estreno de la segunda temporada de El Juego del Calamar ha reavivado la polémica en torno a uno de sus actores. Y es que, ya desde los primeros adelantos algunos criticaron el fichaje de Song Young-chang. El actor, que en la ficción encarna al jugador 100, había sido imputado en el pasado por prostitución de menores y ahora, con el estreno de los nuevos capítulos, las quejas de algunos fans no se han hecho esperar.
Según apuntaba KBIZoom en noviembre, tras el lanzamiento de un tráiler de la nueva temporada de la serie de Netflix en el que aparecía Young-chang, el intérprete fue condenado en septiembre del 2000 por prostitución infantil. Tal y como recoge el medio, el actor pagó 150 dólares a una joven de 16 años por mantener relaciones sexuales con él en un vehículo. Según Yahoo Entertainment, la menor reconoció al hombre por su trabajo como actor, una circunstancia atípica que atrajo atención sobre el caso.
Young-chang, que fue la primera persona de la industria audiovisual en Corea del Sur condenada por esos cargos, vio su carrera gravemente resentida, ya que se le vetó permanentemente en las principales cadenas de televisión surcoreanas. Tras pasar un mes entre rejas (aunque inicialmente había sido condenado a diez), el actor se trasladó temporalmente a Canadá, alegando querer aprender inglés. Desde entonces, ha aparecido en algunas obras de teatro.
Al conocer que el intérprete formaría parte de la popular ficción de Netflix, fueron muchos los que no dudaron en expresar su descontento por redes sociales... apuntando además a otras polémicas con el reparto de la misma.
"Realmente acaban de fichar a todo el mundo de la lista de delincuentes", comentó una usuaria en X, antes Twitter, donde han sido varias las quejas por la presencia del actor en la serie de Netflix.
Young-chang no es la primera estrella de El juego del calamar con problemas con la justicia. Este mismo año, Oh Yeong-Su, que daba vida al jugador número 1 en la primera temporada de la ficción, papel que le valió un Globo de Oro a mejor actor de reparto, era condenado debido tras ser acusado de dos cargos de acoso sexual que supuestamente tuvieron lugar en 2017. Su pena de cárcel, de ocho meses, quedará en suspenso durante dos años y, si en ese periodo no comete ningún delito, no será encarcelado.