España y Marruecos han acordado este miércoles la reapertura de la frontera terrestre de Ceuta y Melilla "en los próximos días", según ha anunciado desde Marrakech el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares.
Albares, que ayer mantuvo su primer encuentro con su homólogo marroquí, Naser Burita, y este miércoles ha vuelto a reunirse con él, ha indicado que los dos han llegado "al acuerdo definitivo para la reapertura de las fronteras terrestres con Ceuta y Melilla en los próximos días".
El ministro ha aclarado que será el Ministerio del Interior el que desvele la "fecha exacta" porque tras la "decisión política" que ya se ha tomado ahora queda ultimar los detalles y los aspectos operativos de la misma.
Con todo, ha dejado claro que "el acuerdo ya es definitivo y se producirá la apertura por esos pasos y esas aduanas en los muy próximos días".
Preguntado sobre si esto significa que a la aduana existente en Melilla y que cerró en 2018 se sumará ahora una nueva en Ceuta, tal y como dijo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras la declaración conjunta del 7 de abril, Albares ha esgrimido que "está muy claro" lo que dice dicho documento firmado tras el encuentro entre el jefe del Ejecutivo y Mohamed VI.
"Se habla de control de personas y mercancías", ha incidido, subrayando que en su declaración conjunta la víspera Burita aseguro que Marruecos está comprometido con "cumplir todos los puntos" de la misma.
Reapertura gradual y ordenada
El ministro de Exteriores ha insistido en que a falta de los "aspectos prácticos", que debe cerrar Interior, los dos países tienen claro que quieren que la reapertura de la frontera, que se cerró en marzo de 2020 por la pandemia, "sea de forma ordenada, gradual, para que realmente sea de beneficio mutuo".
Así las cosas, ha querido dejar claro que "detrás de esas palabras hay toda una nueva forma de enfocar nuestra relación" y un deseo también de que "desaparezca el comercio atípico, que en materia de mercancías estemos en los mejores estándares internacionales, con transparencia dentro de la regulación".
Por otra parte, no ha querido confirmar si se mantendrá o no la exención de visados de la que actualmente se benefician los marroquíes de Nador y Tetuán para entrar en Ceuta y Melilla, que ha incluido entre los "aspectos operativos y prácticos" que ultima Interior, ni tampoco si está sobre la mesa incluir a las dos ciudades autónomas en el espacio Schengen. Es una "reflexión que tiene distintos actores y vertientes, estamos en esa reflexión", se ha limitado a decir.
Como ya hiciera la víspera junto a Burita, ha sacado pecho de la hoja de ruta trazada por España y Marruecos en esta nueva etapa de la relación y de los resultados concretos que ya se están consiguiendo, como la disminución de las llegadas de inmigrantes irregulares a Canarias.
Hoja de ruta ambiciosa
Se trata, ha dicho Albares, de una hoja de ruta que "es muy ambiciosa y necesita un cierto tiempo para desarrollarse". "Se está desarrollando sin urgencias pero sin pausa y la reapertura de la frontera de Ceuta y Melilla es un ejemplo de ello".
También ha mencionado la celebración en junio en España de la reunión del grupo de trabajo sobre delimitación de aguas territoriales en la fachada atlántica, que llevaba 15 años sin reunirse, así como la inauguración el 24 de mayo en el Museo Arqueológico de la exposición conjunta 'Las Columnas de Hércules'.
Junto a Burita, han acordado que las reuniones de los distintos grupos de trabajo incluidos en la declaración conjunta se irán celebrando de forma alterna en Marruecos y España y también han reafirmado la voluntad de que la Reunión de Alto Nivel (RAN) se celebre antes de final de año, tras lo cual habrá "un nuevo tratado de amistad y cooperación que plasmará este nuevo espíritu de ausencia de acciones unilaterales, respeto mutuo y acciones muy concretas como todas estas".
En otro orden de cosas, el ministro no ha querido comentar si ha tratado con su homólogo marroquí sobre el espionaje a Sánchez, la ministra de Defensa y el titular de Interior con 'Pegasus', repitiendo en hasta tres ocasiones que las relaciones internacionales y bilaterales "se basan en hechos, no en conjeturas ni hipótesis" ante los señalamientos de que Marruecos podría estar detrás.
Albares ha viajado a Marrakech para asistir a la reunión ministerial de la Coalición Internacional contra Estado Islámico, la primera que se celebra en el continente africano. En este sentido, ha subrayado que "el epicentro del terrorismo y el yihadismo en estos momentos se encuentra en África y especialmente en el Sahel, zona que España conoce bien".
"Conocemos la región, apoyamos su seguridad y su desarrollo y nos tomamos muy en serio este desafío", ha asegurado, lamentando que aunque Estado Islámico "se ha debilitado" en Siria e Irak, es ahora África, y en particular el Sahel, "donde se encuentra la principal amenaza de amenaza de un fenómeno que desgraciadamente no ha desaparecido".
El ministro ha aprovechado su asistencia a la reunión para mantener varios encuentros bilaterales con algunos de sus homólogos. Así se ha reunido con el ministro turco, Mevlut Cavusoglu, cuyo país es "un aliado clave en la OTAN", y con la de Suecia, Anne Linde, cuyo país está barajando entrar en la Alianza Atlántica. Con ambos ha tenido ocasión de hablar de la cumbre de Madrid del 29 y 30 de junio.
Asimismo, Albares ha mantenido un encuentro con su homólogo de Mauritania, Mohamed Salem Uld Merzug, con quien ha abordado "asuntos bilaterales, la situación de seguridad en el Sahel, comercio e inversiones", según ha indicado en su Twitter. "Mauritania es un país amigo y socio estratégico para España", ha recalcado.
También se ha entrevistado con su homólogo de Arabia Saudí, Faisal bin Farhan; el de Kuwait, Ahmad Naser al Sabá, y el de Bahréin, Abdullatif bin Rashid al Zayan. "Seguimos trabajando con nuestros socios en el Golfo por nuestra estabilidad y prosperidad", ha destacado.