Está comprobado que el papel de aluminio sirve para mucho más que para guardar bocadillos o envolver sándwiches. Este curioso papel que todos tenemos en la cocina dada su gran utilidad para la conservación de alimentos, también tiene otras funciones poco o nada cercanas a la comida.
Se puede meter en la lavadora, es ideal para mantener el hielo intacto dentro de una botella o incluso para meterlo en el congelador. Sí, como lo oyes. Las famosas bolitas de aluminio que solemos hacer cuando nuestro bocadillo se ha acabado, pueden ser muy útiles para un electrodoméstico de nuestra cocina. ¿Quieres saber por qué?
Bolas de aluminio en el congelador
Como bien sabrás, la función del papel de aluminio es mantener los alimentos con la temperatura que tienen durante el mayor tiempo posible. Esto significa que es un buen conductor térmico, por lo que puede servir para otras muchas funciones.
Seguro que has pasado varias veces por la etapa de quitar hielo del frigorífico o del congelador. De vez en cuando, para evitar la acumulación de hielo y que se creen capas gordas que impidan el buen funcionamiento y la respiración del electrodoméstico, hay que quitar estos bloques propios de un iglú.
Para que este trabajo, que puede resultar arduo si el hielo lleva tiempo congelado, hay un truco muy sencillo con el protagonista de este artículo, el papel albal.
Esta tarea, que según los expertos debería llevarse a cabo cada año al menos en una ocasión, no debe hacerse mediante golpes que estropeen y acorten la vida útil del congelador.
Para empezar, como es lógico, para limpiarlo en profundidad y terminar haciendo un buen trabajo es esencial que desconectes el aparato y saques todos los alimentos que pueda haber en su interior.
Una buena ocasión para hacer dicha tarea es cuando nos vamos de vacaciones o incluso a la vuelta, ya que habitualmente dejamos muy pocos alimentos en frigo.
Paso a paso
Desconectar el electrodoméstico de la corriente eléctrica garantiza que no sufriremos ningún daño, dado que para este truco también nos hará falta un secador, lo que puede ser una corriente peligrosa si dejamos el frigorífico o el congelador conectado y se junta el agua con el secador.
El truco consiste en hacer bolitas de papel de plata y calentarlas con el secador. Las pasaremos sin golpear por los lados en los que se acumula más hielo o incluso podemos cubrir dicha superficie con el papel y darle con el aire caliente del secador.
Aunque parezca un truco muy sencillo y lo es, debemos tener cuidado con el agua sobrante que se escurre por los rincones más inesperados y puede llenar el suelo de agua.
Más usos del papel de aluminio
Afilar las tijeras
Dado que es un papel muy cortante, podemos doblar varias capas e ir cortando con la tijera que queramos afilar. De esta manera notaremos como cada vez el filo es más cortante.
Sellar bolsas de plástico
Con una capa de papel de aluminio sobre la bolsa que queramos sellar, pasamos la plancha caliente. De esta manera se sellará herméticamente.
Eliminar la electricidad estática
Si frotamos una capa o una bola sobre superficies o ropa que tenga electricidad estática, será una manera de eliminarla fácilmente.
Quitar el olor a cebolla
Si tras cortar cebolla te huelen las palmas de las manos, un truco sencillo para eliminarlo fácilmente es frotar con un poco de papel de aluminio sobre las manos. También ayudará, claramente, que nos limpiemos con jabón de manos.
Hacer un embudo
Si no tienes un embudo a mano y necesitas verter un líquido de un envase a otro más estrecho, puedes improvisar uno haciéndotelo con papel de albal.
Ahorrar jabón
Si utilizas pastilla de jabón en el lavabo, verás que con la humedad esta se desgasta y se malpierde mucho. Envuélvela en papel de aluminio cuando no la uses y verás cómo dura más.
Limpiar las joyas de plata
Forra un bol con papel de aluminio y coloca en él tus joyas de plata. Vierte agua muy caliente y añádele bicarbonato y sal. Déjalo actuar entre 15 y 30 minutos, aclara las joyas y por último sécalas con un paño suave. ¡Verás cómo brillan!