La de este lunes ha sido la primera huelga de 24 horas, hay más convocatorias para todo el mes de febrero y acumulan ya meses con paros parciales en el servicio, pero los trabajadores de Bizkaibus están dispuestos a llegar "hasta donde haga falta" para que defender sus reivindicaciones. "Estamos muy fuertes y no vamos a parar", ha advertido hoy el presidente del comité de la concesionaria de Ezkerraldea-Metzaldea, Juan Carlos González, quien ha vuelto a reclamar a la Diputación que se involucre en la resolución del conflicto.
Cuatro de las cinco concesionarias de Bizkaibus, que se encuentran sin actualizar su convenio y con las negociaciones paradas, secundan hoy una huelga de 24 horas, con manifestaciones que han recorrido Bilbao, por un convenio justo y subidas salariales conforme al IPC. Esta será la primera jornada de las que tendrán lugar en el mes de febrero, las siguientes serán el 16 de febrero, 22 y 28.
El único Bizkaibus que presta servicio normal es el de Avanza Durangaldea, que acordaron una subida salarial en torno al IPC para este año en el convenio. Representantes sindicales de las otras cuatro concesionarias de Bizkaia vienen reclamando a empresas y Diputación la misma subida salarial.
Las tres columnas de manifestaciones, que han partido esta mañana desde la sede de EITB, en San Mamés; la plaza de San Pedro, y Deusto, y Juan de Garai, han confluido en la Gran Vía, donde los trabajadores se han concentrado frente al Palacio Foral. "No entendemos hasta dónde quieren llegar quienes dirigen la Diputación Foral, hasta dónde van a seguir permitiendo a las empresas que gestionan el transporte rodado de Bizkaia que hoy, por ejemplo, los universitarios sigan siendo damnificados de esas reivindicaciones", ha criticado González. "Hay muchos ciudadanos que no tienen otro medio de transporte y hoy están sin él. Esperamos que saquen una lectura de lo que ha ocurriendo en las calles y, si no lo hacen ellos, la ciudadanía al menos sí lo va a hacer".
Con paros parciales que comenzaron en otoño y más convocatorias de huelga de 24 horas para este mes de febrero, el presidente del comité ha asegurado que las plantillas no cejarán en sus reivindicaciones. "No vamos a parar hasta conseguir ese convenio justo, vamos a seguir hasta el final. No sabemos si será un mes, siete, ocho o 25 años, lo que haga falta para que los ciudadanos tengan el servicio que se merecen", ha avanzado González.
Los trabajadores han vuelto a reclamar a los gestores forales que "asuman su responsabilidad" y obliguen a las empresas a "sentarse en las mesas de negociación" ya que, a día de hoy, las conversaciones para negociar los convenios colectivos están "completamente paradas, sin ninguna llamada ni movimiento en ninguna de las concesiones. Hay una pasividad absoluta, un inmovilismo total, tanto por parte de las empresas, porque nadie las aprieta, como por parte de la Diputación", ha lamentado.
"Diferencias astronómicas"
"No nos parece de recibo que tanto el diputado de Transportes como el diputado general estén permitiendo esta discriminación salarial dentro del mismo colectivo de Bizkaibus", ha hecho referencia al acuerdo alcanzando en Avanza, concesionaria en Durangaldea, que sí ha firmado en su convenio una subida salarial para sus más de 400 trabajadores.
La huelga ha sido secundada por alrededor de un millar de trabajadores de las concesionarias Vectalia Txoriherri, Ezkerraldea Meatzaldea (EMB), Busturia Lea Artibai (BLB) y Vectalia Enkarterri, las cuatro que aún no han actualizado sus salarios. "Avanza, con los mismos medios, es capaz de llegar a un acuerdo con sus trabajadores, mientras que Vectalia y la UTE Alsa-Transitia dicen que no pueden sentarse en las mesas de negociación. No entendemos qué está pasando pero la Diputación tiene que obligarse a que terminen esas desigualdades", ha reclamado. "Son diferencias elevadas; no estamos hablando de decimales, que siempre han existido y se han compensado con mejoras sociales, pero ahora son astronómicas, estamos hablando de dos dígitos".
González ha afirmado que el seguimiento de la huelga está siendo "masivo", manteniéndose únicamente los servicios mínimos. "La plantilla está muy fuerte; cada día que transcurre está con más ganas de conseguir este convenio justo por el que estamos peleando", ha finalizado.