Las plantas son un bonito elemento decorativo tanto dentro del hogar como en los espacios exteriores, ya sean balcones, terrazas o jardines. Sus propiedades saludables también son innegables: purifican el aire, reducen la sequedad del ambiente y hacen el entorno más bello y acogedor, lo que contribuye con su belleza al bienestar emocional.
Sin embargo, no todas las especies son iguales y algunas pueden suponer un serio peligro para la salud, sobre todo si en el hogar hay niños, mascotas o personas con alergias, ya que pueden resultar venenosas, tóxicas o producir algunas reacciones. Expertos de Kronos Homes señalan que en España hay catalogadas más de 60 plantas peligrosas y saber cuáles son ayudará a reducir el peligro que puede suponer ingerirlas o simplemente rozarlas.
Una mujer fotografía con el móvil una de sus plantas.
Plantas tóxicas de interior
- Monstera Deliciosa. Llama la atención por sus bonitas hojas, pero ingerirla puede provocar síntomas graves como hinchazón de la lengua y de la faringe, dificultad respiratoria y convulsiones.
- Aloe Vera. En perros y gatos, su ingesta puede causar una intoxicación grave.
- Sanseviera. Si una mascota presenta salivación excesiva o diarrea y hay sospechas de que ha podido ingerirla, es necesario acudir al veterinario. En las personas puede provocar náuseas.
- Filodendro. Su solo contacto puede provocar dermatitis y una inflamación generalizada del aparato digestivo.
- Espatifilo. En muchas casas se utiliza como purificador de aire y para refrescar el ambiente. Su ingesta puede provocar vómitos, náuseas, diarrea y dificultad para hablar o tragar. En los perros afecta a las mucosas y produce trastornos digestivos.
El espatifilo, una de las plantas poco recomendables par el hogar.
- Kalanchoe. Sus llamativas flores de colores albergan sustancias tóxicas que pueden provocar taquicardias o incluso la muerte si son ingeridas.
- Cala. Es una planta elegante y delicada que, sin embargo, posee una savia tóxica. Puede producir desde dolor de garganta a irritación en la piel y en las mucosas.
- Poto. Todas sus partes son tóxicas, pero especialmente las hojas. Al chuparlas o masticarlas pueden producir irritación en las mucosas, diarrea o vómitos.
- Flor de Pascua. Pese a su apariencia inofensiva, esta planta navideña es tóxica para humanos y venenosa para perros y gatos.
- Ficus. Es muy vistosa, pero su simple contacto puede provocar dermatitis, tos y picor de ojos.
Un ejemplar de ficus en una sala de estar.
Plantas venenosas de exterior
- Estrella de Belén. Su ingesta afecta sobre todo al sistema nervioso. También puede ser un foco de plagas puesto que atrae a las moscas blancas y a las babosas.
- Dedalera o digitalis. Tiene flores con forma de dedal y unas grandes hojas y si se ingiere puede provocar ataques al corazón.
- Adelfa. Un mínimo consumo de sus hojas o de sus flores puede causar convulsiones, vómitos, diarrea y taquicardias, y si se ingiere en gran cantidad, incluso la muerte.
- Estramonio. Conocida también como Trompeta de ángel es un arbusto con unas flores muy llamativas y unas semillas tóxicas.
El estramonio o 'trompeta de ángel' tiene unas llamativas flores.
- Peyote. Sus semillas ubicadas en la parte superior de la planta pueden causar alucinaciones.
- Hortensia. La ingesta de sus hojas y de sus flores produce efectos parecidos al consumo de cianuro. En dosis pequeñas hará que el individuo padezca desagradables efectos secundarios, pero en dosis altas puede provocar paros cardíacos e incluso la muerte.
- Hiedra venenosa. Ingerir sus frutos altera el sistema nervioso y su contacto puede provocar dermatitis, inflamación y ampollas.
En el caso de que el hogar viva alguna persona con alergias hay que evitar plantas como aliso común, abedul, gramíneas, jazmín, enebro, olivo, aligustre, castaño, álamo o platanero. En interiores se debe prescindir de dalias, margaritas, girasoles, jazmín o lilo.