A lo largo de los últimos días, la comitiva ha ido llegando hasta Berlín para compartir el gran momento. El estreno de la película 20.000 especies de abejas en la Sección Oficial de uno de los festivales más importantes del mundo es ya historia para el cine vasco.
En realidad, va a ser las tres y media de la tarde cuando se produzca el primer pase para el público, pero el filme de la laudioarra Estibaliz Urresola Solaguren ya se ha encontrado con la prensa acreditada, igual que ella y el resto del equipo, que han comparecido ante los medios para dar todos los detalles posibles sobre este canto a la diversidad.
"Mi deseo fue aportar algo, desde mi ámbito de trabajo, que es el cine, a la tarea de aproximar posiciones que aparentemente están muy distantes", ha apuntado tras la proyección para los medios de su filme la cineasta alavesa, que considera que el cine puede ser una "herramienta" para "acercar realidades múltiples". Su película, ha subrayado, recorre "múltiples despertares" en torno a la transexualidad.
Arropada por gran parte del reparto que da vida a la película, incluyendo a los jóvenes Sofía Otero, la gran protagonista de la historia, y Unax Hayden, la realizadora, guionista y productora alavesa ha desplegado los argumentos que configuran una producción en cuyo reparto figuran Patricia López Arnaiz, Ane Gabarain, Itziar Lazkano y Sara Cózar, presentes en la capital alemana.
20.000 especies de abejas es, según describe su autora, “un canto a la diversidad de formas de ser y de sentirse que está representada por una colmena familiar” en la que interactúan una madre y tres hijos.
Cambio en la "mirada"
La película cuenta la transformación, no tanto del personaje que transita de un niño a una niña, sino de “la mirada” de los miembros de su familia. “La mirada hacia el que entonces ha sido leído como un niño y que durante ese viaje de verano adquiere las herramientas y conoce a las personas que le permiten reivindicarse a sí misma en la forma en la que se siente”, explica Urresola, que incide en que el filme se detiene en “cómo esta reivindicación impacta en la mirada de los demás”.
Se trata de una historia sobre la diversidad, “sobre la rigidez del sistema de género que impera y que articula todo el sistema social, intentando ampliar esas fronteras, salir un poco”.
La presencia del euskera resulta fundamental en la película, ya que permite al personaje expresarse durante un tiempo en una lengua que no diferencia el género. Para Urresola, “poder llevar el euskera”, como un “aspecto muy importante de la película”, hasta el Festival de Berlín, es motivo de “emoción”.
También la actriz Ane Gabarain destaca que el hecho de que el euskera que escuche en la Berlinale, además en su Sección Oficial. “Eso solo ya es motivo de celebración”, igual que el hecho de que una directora, con su ópera prima, haya conseguido ser elegida en la competición de un certamen de este calado.
“Es una película que emocionalmente llega y te alcanza”, apunta Patricia López Arnaiz sobre un filme que se estrenará en salas el próximo 21 de abril.
De momento, Estibaliz Urresola y sus particulares abejas ya vuelan sobre Berlín. Hasta el sábado, se producirán distintos pases. Por cierto, el de este jueves ya tiene todas las entradas vendidas. También el sábado se conocerá el palmarés y aunque el hecho de estar aquí ya es todo un logro, quién sabe qué más puede pasar.