Con la subida del euríbor, y consecuentemente de las hipotecas, muchas son las personas que se están planteando el dilema de comprar un piso o alquilarlo.
El mercado del alquiler también ha experimentado una notable subida de precios en unas fechas en las que la inflación está desbocada, en niveles máximos desde hace casi 40 años.
En el caso de que te decidas por el alquiler, tienes que tener en cuanta que además de las cuotas pactadas deberás de hacer un esfuerzo económico en forma de fianza y cuotas adelantadas.
Para calcular la cuota de alquiler que puedes permitirte debes seguir algunas reglas generales que obviamente, son una estimación aproximada, pero que pueden servirte para hacerse una idea de qué presupuesto se puede dedicar al alquiler en función de ser una persona, una familia o un grupo de estudiantes, por ejemplo.
Uno de los ejemplos más convenientes a seguir es la regla de las 40 veces o el límite de las 40 veces. Esta norma genérica tiene en cuenta aspectos como el salario o los gastos, tal y como indican desde Bankinter.
Para hacer una estimación de la cantidad de dinero que podemos destinar al alquiler de una casa, lo primero que hay que hacer es:
- Sumar todos los ingresos que entran al hogar en un mes como, por ejemplo, el salario.
- Sumar los gastos reflejados en la tarjeta de crédito, así como los préstamos y otras deudas que se tengan.
- Restar esta cifra de gastos a la primera cifra de ingresos.
- Cuando se tenga la cifra resultante de esta sencilla operación, hay que tener en cuenta que lo mejor es que el alquiler no sobrepase el 30% de la cifra resultante de restar las deudas y los ingresos, aunque también se puede tener en cuenta directamente la regla de las 40 veces.
Lo que recomienda la norma es que el sueldo anual de la persona debe ser, como mínimo, 40 veces el precio del alquiler.
Por ejemplo, si una persona tiene un sueldo de 18.000 euros netos anuales, se podría permitir un alquiler máximo de 450 euros mensuales.
El Banco de España incluso recomienda no gastar en alquiler más del 35% de tus ingresos mensuales para poder afrontar el resto de los gastos.
Consejos para lograr un alquiler más barato
Los precios de los alquileres varían en función de la ubicación, el tamaño y las comodidades de la vivienda. Según cuáles sean tus necesidades, podremos decir de qué aspectos podríamos prescindir en caso de no encontrar alquileres ajustados a nuestros presupuesto.
En páginas como Idealista puedes ver cuál es el precio del metro cuadrado de alquiler en función de la zona. Además, en el caso de Madrid, Barcelona y Valencia tiene una herramienta para conocer el precio por barrio y línea de metro.
Otra opción es son las áreas periféricas para disfrutar de un alquiler más ajustado a tu presupuesto, sin prescindir de los metros cuadrados. Algunas zonas están tan bien comunicadas que se tarda incluso menos en los desplazamientos, pero también corres el riesgo de gastar más en transporte al mes. En base a nuestros hábitos y a nuestro lugar de trabajo podemos calcular cuál es la que mejor se adapta a nuestras necesidades.
Las agencias inmobiliarias suelen cobrar una comisión de hasta un mes al alquilar un piso. Debes tener en cuenta este importe a la hora de calcular el gasto que puedes permitirte. Esto no significa que siempre te salga más costoso contratar un piso mediante agencia, a veces podemos encontrar mejores ofertas de alquiler que entre particulares.
Además, existen otras cantidades que debemos tener en cuenta a la hora de calcular si nos podemos permitir un determinado piso, como la fianza que debemos depositar o los gastos mensuales en suministros. Por ejemplo, no es igual el gasto de un piso con calefacción central soportada por el propietario, que uno con calefacción individual eléctrica.