Vox ha vuelto hoy a encender el Congreso en boca del diputado Víctor Sánchez del Real al rebajar a "bronca de colegio de monjas" el ataque a la ministra de Igualdad Irene Montero, defender la "hombría" y "coraje" de su compañera Carla Toscano y cuestionar la doble vara de medir de la Mesa por no censurar cuando a ellos les insultan.
A gritos y con voz impostada, Sánchez de Real ha pormenorizado los numerosos calificativos que, según ha dicho, se han proferido contra los diputados de Vox en las últimas 48 horas durante el debate de presupuestos sin que hayan sido retirados del diario de sesiones.
Herederos del régimen, indignos, banda de fascistas, promotores de la violencia contra las mujeres, xenófobos o machistas son algunos de los adjetivos citados por el diputado, a los que ha sumado, ya bajando la voz y en tono infantil, la acusación de ayer de la ministra Irene Montero de que provocan la "violencia política".
"En presencia de todos ustedes y de esta Presidencia, le gritaron a una mujer que no lloró porque tiene más hombría, más valentía, coraje una sola diputada de Vox que toda la Mesa del Congreso y que todos los diputados zurdos", ha subrayado.