La tormenta de ayer, intermitente, ha sido una excepción en un verano seco y caluroso que también está generando consecuencias en la Comarca de Pamplona. Porque hasta el 31 de julio se acumularon 516mm de agua de lluvia en Eugi, un 42 % menos que la media de los 15 años anteriores. En todos los meses la precipitación ha sido inferior a la media, sobre todo en febrero, mayo, junio y julio. Una tendencia que ha sido similar en toda la Cuenca.
Eugi acumula un 42% menos de agua de lluvia que la media de los 15 años anteriores
Según un informe de la Mancomunidad, a las bajas precipitaciones hay que añadir las altas temperaturas registradas, especialmente entre mayo y agosto con sus olas de calor extremo. Una sequía que ha provocado, por una parte, la reducción de caudales de aporte de agua a las fuentes de abastecimiento y, por otra, un incremento del consumo, especialmente de riegos y piscinas.
Menor reserva de agua
El incremento de la demanda y las bajas precipitaciones han supuesto que las fuentes de suministro de Eugi y Arteta dispongan de una menor reserva de agua para la época. En consecuencia, desde el Canal de Navarra-ETAP Tiebas se ha aumentado el caudal producido respecto a otros años. El embalse de Eugi dispone de un volumen almacenado un 6,4% inferior a 2021 y un 12,3% inferior a la media de los 5 últimos años. Y es que tras el episodio de sequía con mayor incidencia en la comarca de Pamplona en 1995, este 2022 la ausencia de precipitaciones desde mayo no ha permitido poder llenar el embalse, si bien gracias a las reglas de operación actuales el volumen de reserva del embalse se va aproximando a valores de normalidad.
Los embalses de Itoiz y Alloz se encuentran en situación de sequía prolongada en cuanto al volumen almacenado, y en Itoiz el estado es de prealerta por escasez en cuanto a volumen del embalse. Y es que tal y como establece el informe de la MCP presentado este 22 de agosto la Comarca de Pamplona, al igual que el resto de regiones limítrofes, sufre una sequía prolongada motivada por las bajas precipitaciones y las altas temperaraturas. “Sin embargo, si bien sus fuentes de suministro se han visto afectadas, los indicadores de control entran dentro de la normalidad. Se han tomado medidas técnicas preventivas para preservar las reservas. Si la sequía perdura el manantial de Arteta podría entrar en estado de prealerta, en todo caso, el volumen de aportación de Arteta no tiene ninguna implicación para las fases de emergencia”, esgrime el texto.
En el caso de que el embalse de Itoiz alcanzara el estado de emergencia, “las restricciones se realizarían primero sobre usos agrícolas o producción hidroeléctrica siendo prioritario el uso para el abastecimiento. Actualmente el embalse de Itoiz es empleado para el abastecimiento por la Comarca de Pamplona, la Mancomunidad de Izagondoa y la Mancomunidad de Mairaga, sumando unas necesidades menores frente a la capacidad del embalse. En un principio está prevista la parada de la ETAP Tiebas a mediados del mes de octubre, aunque en función de la evolución de la sequía y la recuperación del manantial de Arteta se podría prolongar su actividad”.
El presidente de la Mancomunidad, David Campión, asume que “estamos en niveles normales de verano, pero arrastramos la sequía desde un mes antes que otros años. Y tendría que alargarse mucho para tener problemas –explica–. La situación es de normalidad”.