Eurocopa: Alexander Isak y Mikel Oyarzabal buscan su pase a los octavos

La participación de ambos realistas está resultando desigual con un gran protagonismo para el sueco, mientras que el eibartarra apenas está contando con minutos

Uno de los protagonistas de esta Eurocopa está siendo, sin ningún género de dudas, Alexander Isak. Es cierto que aún no ha estrenado su casillero goleador con Suecia, pero sus actuaciones, primero, ante España, y con posterioridad frente a Eslovaquia, le han convertido por méritos propios en una de las estrellas de este campeonato. El otro realista de la competición, Mikel Oyarzabal, por el contrario apenas está disfrutando de minutos y eso que el rendimiento que está ofreciendo España está generando muchas dudas.

Ambos se juegan este miércoles el pase a octavos de final. Los suecos, ante Polonia, en un partido que comenzará a las 18.00 horas. Mismo horario para el combinado estatal que se la juega a una carta frente a Eslovaquia. Los de Luis Enrique, ganando estarán en octavos, mientras que si pierden, estarán eliminados. El empate les valdría siempre y cuando Suecia se impusiera a la Polonia de Lewandowski. Así las cosas, puede darse el caso de Alexander Isak contribuya de manera decisiva en el futuro de Oyarzabal en esta competición.

Isak ha sido titular en los dos partidos que Suecia ha jugado hasta la fecha, acumulando un total de 158 minutos. Al seleccionador sueco le cayó una lluvia de críticas por sustituirle en el encuentro frente a España, cuando más cerca parecía el gol del combinado nórdico. El fue el protagonista de las mejores acciones de Suecia, con disparo al palo incluido tras un disparo que rebotó en Marcos Llorente. Frente a Eslovaquia, literalmente se salió. Fue el autor de una jugada maradoniana que si llega a acabar en gol, hubiera dado la vuelta al mundo, pero lo impidió una mano salvadora del guardameta eslovaco.

Oyarzabal, por su parte, solo ha jugado 21 minutos (17' ante Suecia y 4' frente a Polonia). Su salida al campo en el estreno de España en la Eurocopa supuso un revulsivo para los de Luis Enrique, que, sin embargo, entendió que su presencia no era necesaria frente a Eslovaquia, apostando por otros compañeros. Hoy parece que tampoco será de la partida inicial en un choque en el que España se lo juega todo a una carta.