Tras un paréntesis primaveral ha vuelto el invierno con toda su crudeza. Desde ayer ya se aprecia el notable descenso de las temperaturas, que empezaron a desplomarse el jueves, con un viento del norte que deja la sensación térmica un par de grados por debajo de los que marca el termómetro.
Febrero se despedirá, de este modo, con los días más fríos del año, ante la entrada de una masa de aire polar ártico y de una borrasca denominada Juliette por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que prevé temperaturas por debajo de las habituales para esta época del año. El descenso térmico implicará un sensible descenso de las cotas de nieve.
Por ello, el Departamento vasco de Seguridad ha ampliado el aviso amarillo por nieve vigente desde ayer domingo hasta el próximo martes, cuando al cota de nieve se situará entre los 100 y los 400 metros aunque se esperan precipitaciones débiles localmente moderadas para ese día.
Este lunes, el frío gélido estará ya plenamente instalado en toda la CAV, y la cota de nieve se situará en 100 metros y subirá hasta los 200 al final del día. No se esperan grandes nevadas, aunque sí serán más abundantes en las horas centrales cuando no se descartan algunos chubascos moderados en el interior de Euskadi.
Segunda ola de frío
En la segunda ola de frío de este año, mañana martes la cota se colocará entre los 100 y los 400 metros con precipitaciones débiles y localmente moderadas en la vertiente cantábrica.
Según las previsiones, es probable que este episodio de bajas temperaturas comience a remitir el jueves, aunque las temperaturas mínimas continuarán con unos valores por debajo de lo normal, al menos, hasta el primer fin de semana de marzo.