Osakidetza contará con al menos con tres servicios de atención a la transexualidad, uno por territorio, dentro de la red de Atención Primaria y garantizará por ley una cartera de prestaciones sanitarias para asegurar el derecho de las personas transexuales a recibir una atención integral y adecuada.
Estas son algunas de las principales novedades que se recogen en la proposición de reforma de la Ley vasca de no Discriminación por Motivos de Identidad de Género y de Reconocimiento de los Derechos de las Personas Transexuales que han registrado en el Parlamento Vasco PNV, PSE-EE y Elkarrekin Podemos-IU.
Según han informado PNV y PSE-EE en un comunicado, este texto se presenta sobre la base de un acuerdo previo con la comunidad transexual y transgénero, que implica una ampliación de derechos y garantías para estas personas.
La norma vasca data de 2012, pero en 2019 se introdujo en ella una importante modificación a partir de la cual las personas transexuales dejan de ser tratadas como enfermas y pueden certificar su identidad sexual sin tener que presentar informes psiquiátricos que lo demuestren, simplemente manifestándolo.
En la reforma planteada ahora se incide en cuestiones dirigidas a garantizar plenamente el derecho de estas personas a recibir de las administraciones públicas vascas una atención adecuada e integral en sus necesidades educativas, sanitarias, jurídicas y laborales.
Además, se incide en la situación de los menores transexuales y se recoge que tienen derecho a ser escuchados y a participar en la toma de decisiones en relación a todas las medidas que se les aplique en lo referente a su identidad sexual.
Para los tratamientos de cambio de género será el propio menor el que otorgue el consentimiento si está enmancipado o si es mayor de 16 años. Si no es capaz "intelectual y emocionalmente de comprender el alcance" de dichos tratamientos o es menor de 16 años, el consentimiento lo dará su representante legal después de escuchar la opinión del afectado.
La negativa de progenitores o tutores a autorizar estos tratamientos podrá ser denunciada cuando conste que puede causar "grave peligro o sufrimiento" al menor de edad y en todo caso se atenderá el criterio del interés superior del menor "frente a cualquier otro interés legítimo".
En el ámbito sanitario, la proposición incluye la unidad especializada en materia de transexualidad dentro de Osakidetza, ya operativa, y como novedad recoge la puesta en marcha dentro de la Atención Primaria de servicios, al menos uno por provincia, de atención y promoción de la salud de las personas transexuales que garanticen el "seguimiento en cercanía" de todo su proceso.
Su objetivo será facilitar a estas personas todos los servicios, tratamientos y actuaciones médicas establecidas por ley, salvo las más complejas, que deben ser prestadas en unidades especializadas.
La norma contempla también dentro de la cartera sanitaria una serie de servicios que van desde el acceso a los tratamientos hormonales hasta el acompañamiento psicológico o psiquiátrico del usuario y de sus familiares.
En este punto se especifica que los menores tendrán derecho a recibir el tratamiento para el bloqueo hormonal al inicio de la pubertad y el tratamiento hormonal cruzado en el momento adecuado para favorecer que su desarrollo corporal se corresponda con el de las personas de su edad.
También se garantiza el acceso a las técnicas de reproducción asistida a todas las personas transexuales con capacidad de gestar.
La ley dedica un capítulo al tratamiento de la transexualidad en el sistema educativo al introducir la obligación de que en los centros en los que haya personas transexuales Educación formará y asesorá de manera adecuada a toda la comunidad educativa. Además, se adecuará toda la documentación administrativa a la identidad sexual del menor y en el caso que haya obligación de vestir uniforme se reconocerá el derecho a llevarlo conforme a esta identidad.
La iniciativa hace referencia también al ámbito laboral y recoge que las administraciones públicas elaborarán medidas de acción positiva para favorecer la contratación de estos ciudadanos.
Desde PNV y PSE-EE, Iñigo Iturrate y Gloria Sánchez, han subrayado que además de dar cumplimiento al programa legislativo del Gobierno vasco, con esta ley "se refuerza y se profundiza en los derechos de las personas transexuales o transgénero y en las iniciativas a desarrollar para hacerlos efectivos" al ser "una ley que suma derechos".
La reforma la han impulsado los partidos en lugar del Gobierno vasco al existir un trabajo previo de los grupos parlamentarios con el colectivo de personas transexuales con los que se ha consensuado el texto. Además, esta vía agiliza la tramitación de una propuesta que se someterá a un periodo de enmiendas por parte de todos los partidos, antes de su aprobación en pleno.