Euskadi sigue ampliando su ámbito de influencia y alianzas, esta vez con su incorporación a G-Nets, la red de ciudades por la sostenibilidad que fundó Tokio y que agrupa a 34 ciudades de cinco continentes, como Nueva York, Londres, París, Roma o Helsinki. Euskadi ha dado un salto porque es el primer gobierno autonómico que entra como tal en la red, formada solo por grandes metrópolis. Y es también el primer gobierno del Estado español en hacerlo. Esta red, que tiene por objetivo crear sociedades justas, ciudades seguras y cuidar del medio ambiente, contará con la nueva incorporación de Euskadi tras el encuentro mantenido este martes entre el lehendakari, Iñigo Urkullu, y la gobernadora de Tokio Metropolitano, Yuriko Koike, todo ello en el marco de la última jornada del Gobierno vasco en su viaje institucional a Japón.
Además, después de que Bilbao fuera elegida ya como sede de la coalición local de la ONU para los objetivos de desarrollo sostenible, el lehendakari se ofrece también a que las próximas cumbres de la red G-Nets tengan lugar en suelo vasco. Por lo pronto, Euskadi ha sido invitada a la cumbre que se va a celebrar en mayo de 2024 en la bahía de Tokio, que en febrero acogió su primer encuentro de alto nivel. Esta red fue creada en 2022 como foro de debate de las ciudades del mundo. Urkullu realizó una valoración “muy positiva” del viaje a Japón, que se ha saldado con la visita de más de 12.000 personas en el primer y segundo día de la Basque Week en Tokio, y destacó que se ha dado “un paso especial” sumando a Euskadi en su globalidad a G-Nets. “El tamaño que tenemos, de dos millones, frente al tamaño de Tokio metropolitano, de 30 millones, ha hecho posible que se incorpore la Euskal Hiria, como comunidad autónoma. Se ha abierto a entes subestatales aunque tengan una población menor", explicó.
Pacto con la juventud
El lehendakari también participó en una mesa redonda del Japan Research Institute sobre el reto demográfico, un debate donde Euskadi y Japón se enfrentan a desafíos comunes como la baja natalidad y el envejecimiento de la población. Urkullu aprovechó este foro para reivindicar las políticas del Gobierno vasco, que ascienden a un total de 152 millones de presupuesto anual, “lo que duplica el presupuesto precedente”. Citó el programa Gaztelagun con hasta 300 euros mensuales para alquilar vivienda, la gratuidad de las escuelas de 0 a 2 años, y las ayudas de 200 euros hasta que los hijos cumplan 3 años de edad. Por todo ello, el lehendakari se refirió a las políticas de juventud, emancipación y reto demográfico como “una prioridad en nuestra visión a 2030”.
“Una prioridad que demanda compartir una estrategia, sumar fuerzas y colaborar para su puesta en marcha. Así, estamos impulsando un acuerdo de país por la equidad intergeneracional. Vamos a impulsar un pacto de, con y por la juventud”, alentó. En ese sentido, se refirió a futuras medidas como las ayudas de emancipación o un nuevo programa de préstamos a proyectos de emprendimiento o formación para personas jóvenes.
Urkullu repasó las cifras de Japón y Euskadi. Los primeros tienen la media de edad más alta del mundo, 48,6 años, y una esperanza de vida de 84,6. En Euskadi, la esperanza de vida es de 83,6 años. En cuanto a la emancipación juvenil, la media europea es de 26,5 años, frente a la muy elevada de 29,7 en Euskadi. También sale mal parada en la edad media para tener hijos, 32,3. Urkullu reconoció que Euskadi “no está bien situada” y señaló varios factores como la escasez de vivienda, las rentas insuficientes y la “necesidad de más ayudas institucionales”, un terreno donde su gobierno apuesta por dedicar la máxima atención.