Euskadi se acerca a la tasa de paro de la UE mientras que España la dobla

El mercado laboral de Europa vive un gran momento, con una tasa de paro en mínimos históricos: la media en la eurozona se sitúa en el 6,5%, mientras que en el conjunto de la Unión Europea es del 6%. Unos buenos datos que no van en sintonía con los que registra el Estado español, que dobla la media europea y se sitúa a la cabeza de todos los países miembro. Según los últimos datos dados a conocer por Eustat, correspondientes a marzo, la tasa de paro española es del 12,8%, un registro que sólo es comparable al de Grecia, la única economía del euro en la que el desempleo alcanza también el doble dígito, en este caso del 10,9%. Italia y Suecia también se sitúan por encima de la media europea, aunque se quedan lejos de España, con un 7,8% y un 7,3%, respectivamente.

Y si el Estado español dobla la tasa de desempleo de la Unión Europea, Euskadi marca distancia y se alinea más con las cifras europeas, al registrar un 8,4% de paro. Según el Instituto Nacional de Estadística, el mercado laboral mantuvo el ritmo de descenso en el arranque del año y, en el primer trimestre, el desempleo bajó al 8,4%, el porcentaje de parados más bajo de todo el Estado. Además, esta pasada semana el Ministerio de Trabajo y Economía Social dio a conocer los números de abril: en la actualidad hay 108.001 personas registradas en Lanbide, la cifra más baja desde 2008. Asimismo, tras ganar 2.588 cotizantes, la fuerza laboral vasca roza el millón de personas –997.244, más concretamente–.

Tras conocer los datos, el viceconsejero de Empleo e Inclusión, Alfonso Gurpegui, se felicitó de que Euskadi haya alcanzado “las cifras de paro más bajas desde 2008 y las cifras de afiliación más altas nunca conocidas”, a pesar de que su población se mantiene y del aumento en las jubilaciones. El consejero destacó también que, en abril, el paro volvió a bajar en Euskadi “en todos los territorios, entre hombres y mujeres, en todas las franjas de edad y en todos los sectores” y, además, se acompaña de “un nuevo máximo histórico de afiliación a la Seguridad Social, de personas que, además de trabajar, tienen derechos reconocidos”. Si se compara con el mismo mes del año pasado, hay 7.553 parados menos inscritos en el servicio vasco de empleo, lo que supone un descenso interanual del 6,54%.

En el conjunto del Estado, los datos también mejoran, pese a continuar en niveles muy por encima de la media europea. El número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo bajó en 73.890 personas en abril en relación al mes anterior (-2,6%) impulsado por el descenso del desempleo en el sector servicios por las contrataciones para la Semana Santa, según los datos publicados esta semana por el Ministerio de Trabajo y Economía Social. De este modo, al finalizar abril, el número total de parados se situó por debajo de la barrera de los 2,8 millones de desempleados, concretamente en 2.788.370, su menor nivel en este mes también desde 2008.

La caída del desempleo en Euskadi ha sido menor en términos porcentuales que la media estatal –aunque hay que tener en cuenta que la CAV parte de una mejor situación–, donde se ha reducido un 2,58% en la variación mensual y un 7,75% en la evolución interanual.

Postpandemia

Tanto las cifras de desempleo en el Estado como en Euskadi mantienen una senda de descenso desde que comenzó el año. Es el caso de Europa también. Y es que la tasa de paro de la eurozona está ocho décimas por debajo del nivel previo a la pandemia, ya que en febrero de 2020 el desempleo entre los países del euro era del 7,4%. Esto demuestra que el mercado laboral se ha mostrado relativamente resistente a las consecuencias de la guerra rusa en Ucrania. Idoia Mendia destacaba recientemente el buen comportamiento de los datos a pesar de las amenazas bélicas e inflacionistas.

En marzo se cumplió un año de la entrada en vigor de la reforma laboral y, según Mendia, “en este tiempo la contratación indefinida ha crecido ocho puntos”. “El porcentaje de contratos indefinidos en este año ha crecido 7,3 puntos, la tasa de quienes además trabajan a tiempo completo ha subido otros 3,6 puntos y el de fijos discontinuos se ha incrementado 1,5 puntos y representan el 3,5% del total de afiliación. A todo ello se suma otro dato significativo: se ha consolidado una tendencia a la baja entre parados de larga duración, que ha sido sin duda uno de nuestros mayores lastres”, detalló Mendia al hacer balance del primer año de la reforma laboral.

Y mientras las cifras de desempleo se van reduciendo, la principal batalla en materia laboral pasa ahora por la exigencia de subidas salariales. Euskadi lidera la conflictividad laboral en el Estado, con un aumento del 35,3% en el número de huelgas en un año, hasta 131,1 cada 100.000 firmas, la mayor marca autonómica por amplia diferencia, mientras que el número de huelguistas ha crecido un 52,6% interanual. El viernes, UGT y CCOO alcanzaron un preacuerdo con la patronal a nivel estatal para recomendar subidas salariales del 4% este año y del 3% en 2024 y 2025, un alza que los sindicatos vascos ELA y LAB consideran insuficiente porque “están muy por debajo de la inflación”.