El expresidente de Bolivia y líder del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), Evo Morales (2006-2019), acusó este domingo al presidente, Luis Arce, de tener un plan para "prorrogarse" en el poder y dijo que gobierna "a través de fallos judiciales".
El exmandatario afirmó que el presidente tiene un plan para seguir en el poder y que "ofreció a los magistrados del Tribunal Constitucional Plurinacional una extensión de su mandato hasta el 2027" para que lo ayuden con su "plan".
Los magistrados de las altas cortes de Bolivia debían terminar su mandato en 2023, pero por trabas en el senado no se convocaron elecciones judiciales, por lo que extendieron su mandato hasta que se realice una nueva convocatoria de esos comicios.
En su programa dominical en la Radio Kawsachun Coca, Morales también criticó el congreso del MAS impulsado por los seguidores de Arce que se desarrolla en El Alto, ciudad contigua a La Paz.
"Lucho (Arce) quiere refundar el partido para derechizarlo", comentó el exjefe de Estado en su intervención.
El viernes durante la inauguración del cónclave oficialista, el presidente Arce pidió a los seguidores del MAS "refundar" el partido para que no quede en "manos de una persona", sin mencionar a Morales.
Morales ha criticado el Gobierno de Arce y lo llamó "el peor presidente de la época democrática" del país.
El congreso del MAS impulsado por el Gobierno concluye este domingo. Se espera que se conforme una nueva junta directiva y que Evo Morales quede fuera de la dirigencia del partido.
Por su parte, el bloque que apoya a Morales convocó su propio congreso del partido gobernante para el 10 de julio en la población de Villa Tunari, en el Trópico de Cochabamba, principal bastión político y sindical del exmandatario.
Arce y Morales están distanciados desde 2021 y el año pasado sus diferencias se profundizaron por la celebración de un congreso nacional del partido en el que, en ausencia del mandatario y de sus sectores leales, el expresidente fue ratificado como líder del MAS y nombrado "candidato único" para las elecciones de 2025.
Arce no asistió a ese encuentro al considerar que las organizaciones sociales, base del partido, no estaban debidamente representadas.
Las tensiones aumentaron después de que el TSE decidiera anular el congreso de 2023 e instruir que se convocara uno nuevo consensuado, algo en lo que tampoco se han puesto de acuerdo ambas facciones oficialistas.