El Ministerio de Asuntos Exteriores recomienda "extremar la atención y la precaución" en los viajes a Suecia tras la decisión del Gobierno sueco de elevar el nivel de alerta terrorista.
El ministerio ha actualizado sus recomendaciones de viaje después de que este jueves las autoridades suecas elevaran el nivel de amenaza terrorista al segundo más alto por varios factores, entre los que figuran las protestas de varios países musulmanes por las recientes quemas del Corán en el país escandinavo.
La amenaza, por primera vez en siete años, pasa del tercer al cuarto nivel en una escala de cinco, lo que supone que ahora es "alta", aunque los servicios de inteligencia suecos rechazaron que existan sospechas concretas y hablaron de un análisis conjunto.
Suecia es un objetivo 'prioritario' para posibles atentados
En consecuencia, la página de Recomendaciones de Viaje de la web de Asuntos Exteriores ha modificado este viernes, después de que las autoridades suecas consideran que su país "ha pasado de ser un objetivo terrorista 'legítimo' a ser un objetivo 'prioritario', con un aumento de las posibilidades de atentados" en él.
Por ello, el departamento que dirige en funciones José Manuel Albares aconseja "extremar la atención y la precaución, especialmente en lugares con gran afluencia de personas" y tener en cuenta el teléfono de Emergencia Consular de la embajada "en caso de amenaza o ataque terrorista".
Alerta también por el clima y las altas tasas de criminalidad
La página también advierte de la alerta emitida por las autoridades suecas sobre "episodios climáticos extremos en algunas zonas del país, con posibilidad de fuertes lluvias e inundaciones".
El tercer asunto de riesgo potencial en Suecia es la seguridad ciudadana y criminal ya que, según Exteriores, el país "tiene unas sorprendentemente altas tasas de criminalidad".
Así, señala que se registran, con cada vez más frecuencia, robos en zonas turísticas, por lo que se hace necesario "guardar precaución con los efectos personales" en puntos como el casco histórico de Estocolmo, las estaciones de ferrocarril y de metro, y los autobuses que conectan los aeropuertos con las ciudades principales.
Además, advierte de que algunas zonas periféricas de grandes ciudades como Estocolmo y Malmö han sido "escenario de actos delictivos o vandálicos" y han "aumentado en los últimos tiempos la frecuencia de tiroteos entre bandas criminales".
Por ello, la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores califica de "zonas de riesgo que deben ser evitadas" la periferia y áreas industriales de grandes ciudades como Estocolmo, Gotemburgo y Malmö.