Ezkurdia se toma la revancha

Un frontón Labrit abarrotado y enloquecido disfrutó en la matinal de ayer, 7 de julio, día de San Fermín, copatrón de Navarra, de un gran partido entre Joseba Ezkurdia y Unai Laso. Los protagonistas de la última final del Manomanista de la LEP.M, disputada hace algo más de un mes en el Navarra Arena y de la que salió triunfador el delantero de Bizkarreta-Gerendiain (22-7) para calarse su primera txapela como profesional, se midieron a cara de perro en busca de otro título, el de la jaula sanferminera. Y en esta cosasión quien salió vencedor del duelo fue Ezkurdia. Es decir, una venganza en toda regla.

Aunque no es lo mismo ganar el mano a mano que el Cuatro y Medio de San Fermín, una txapela es una txapela. Y los dos protagonistas del envite se dejaron el alma sobre la cancha de un Labrit lleno hasta la bandera y enfervorizado. A Ezkurdia, que reconoció que el partido se le hizo largo y que el asfixiante calor le pasó factura en algunos tramos del envite, le salió bien el plan de dar violencia y velocidad a sus golpeos para apuntarse la victoria y subir al primer escalón del podio. Con el dos paredes como arma preferente (hasta seis tantos se apuntó el arbizuarra de esta forma), Ezkurdia salió victorioso de un encuentro en el que la grada volvió a ser protagonistas tras un 2020 sin feria por la pandemia y un 2021 con feria a puerta cerrada también por culpa del covid.

Pese a que fue Ezkurdia quien se hizo con la txapela, Unai Laso se lo puso difícil. No fue el mejor partido del delantero de Bizkarreta-Gerendiain, que cometió más errores de los habituales (fueron nueve, aunque muchos de ellos forzados por la violencia del golpeo de su adversario) y además concluyó con problemas físicos en el cuádriceps de su pierna derecha que ponen en entredicho su participación en el torneo de parejas de San Fermín que comenzó ayer mismo por la noche.

La final tuvo de todo. En la cancha y en la grada. Porque hubo tacadas, empates y tantos de mucho mérito, aunque la iniciativa en el marcador la llevó casi siempre Ezkurdia, a excepción de en el 3-2 y el 4-3. Pero después de la igualada a 12 (que se produjo tras un parcial de 6-0 a favor de Laso, que niveló un 6-12 adverso), ya no hubo color. Ezkurdia, que parecía muerto, supo sufrir e imponer su ritmo para hacerse con el triunfo.

Ayer y hoy

Si todo va bien y los protagonistas de la final descansan y consiguen recuperarse del esfuerzo del partido de ayer, hoy repetirán enfrentamiento en el torneo de parejas. Laso, en compañía de Jon Mariezkurrena; Ezkurdia, con Julen Martija. Lo que no cambia es el escenario, un Labrit abarrotado.