El cineasta suizo Alain Tanner, una figura del cine nacional y europeo, conocido además por su militancia, ha muerto a los 92 años, anunció este domingo la asociación que lleva su nombre.
Tanner es considerado el padre del "renacimiento" del cine suizo en los años 70 del pasado siglo y desde entonces ha sido un referente para las posteriores generaciones de profesionales del cine, a los que también inspiró con su activismo.
Las películas con las que Tanner marcó una época fueron "Carlos, vivo o muerto" (1969), "Salamandra" (1971) y "Jonas tendrá 25 años el año 2000" (1976), una película que tuvo una repercusión internacional y que abordaba la desilusión que siguió al movimiento social de 1968.
En 1983 rodó "En la ciudad blanca", a la que siguieron "Una llama en mi corazón" (1986), "Fourbi" (1996), "Jonas y Lila, hasta mañana" (1999) y "Flores de Sangre" (2002), entre otras.
Varios reconocidos festivales de cine, europeos como Cannes, Venecia y Locarno, y también estadounidenses, galardonaron sus películas.
Tanner se convirtió en una figura fundamental para el cine en Suiza por su convicción de que hacer cine era, más allá de un arte, un acto de naturaleza política, lo que lo llevó a implicarse -entre otras causas- a favor de la población palestina en la franja de Gaza.