El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha subrayado que el Partido Popular hará una oposición "proporcional y proporcionada" frente al Gobierno "radical" y que no aceptará tutelas ni del Ejecutivo de ningún otro partido, en alusión a Vox, al que no ha mencionado.
El jefe de la oposición ha intervenido ante el Comité Ejecutivo Nacional de su partido, que este jueves ha ratificado los cambios en la dirección y las portavocías parlamentarias, y ante los suyos ha defendido que solo los intereses de la ciudadanía guiarán su labor de oposición y que ni el Gobierno ni sus altavoces mediáticos conseguirán amedrentarles.
"Sánchez quiere de mí lo que el PSOE es para sus socios, una marioneta, y os aseguro que ni lo soy, ni lo somos. La única mansedumbre que la España de hoy tiene es la del Gobierno con el independentismo", ha recalcado Feijóo ante los suyos.
Feijóo ha pedido ofrecer "una política responsable ante un Gobierno reaccionario" porque "la única esperanza es que la oposición sea mejor que el Gobierno", al que ve "débil a nivel interno y externo", "dividido" y "condicionado por la radicalidad de sus miembros socios y postulados".
Ante una legislatura que se espera bronca, marcada por la ley de amnistía, y que ha nacido rodeada por protestas en la calle, Feijóo ha pedido a los suyos dar su "mejor versión".
Y en un contexto en el que Vox reclama unidad de acción mientras acusa al PP de falta de contundencia, y la izquierda denuncia, por contra, que los populares se están radicalizando, ha lanzado dos mensajes: no van a "controlar ni tutelar" al PP y no aceptará que el Gobierno trate de "manipular" y "enfrentar" a los populares entre sí.
"Nuestro trabajo no es mirarnos al ombligo, nuestro trabajo es mirar a los ciudadanos. Nuestro trabajo no es escucharnos ni discutir en las vidas orgánicas, nuestro trabajo es ver cómo vive la gente de verdad y ser útiles con nuestras propuestas y con nuestros anhelos", ha recalcado ante su partido.
Feijóo ha explicado y detallado los cambios en el Comité de Dirección del partido, al que ha sumado cuatro vicesecretarias, hasta tener mayoría de mujeres en su cúpula -diez frente a seis hombres- y en el que ha potenciado la igualdad o el desarrollo sostenible.
Este equipo, ha señalado, "no regalará ninguna bandera ni al Partido Socialista ni a sus socios" porque "no son suyas" la igualdad, la cultura, la sanidad, la educación, el reto demográfico, el desarrollo sostenible ni "la representación de la diversidad territorial de un país donde gobierna mayoritariamente el Partido Popular".
Feijóo ha lanzado todos estos mensajes ante un Comité Ejecutivo en el que se estrenaban Miguel Tellado y Alicia García como portavoces del Congreso y el Senado, donde contarán con Macarena Montesinos y con Javier Arenas como secretarios generales de sus grupos, respectivamente.
Le escuchaban además las nuevas incorporaciones de la dirección: Ana Alós, vicesecretaria de Igualdad y conciliación; Paloma Martín, al frente de Desarrollo Sostenible; Ester Muñoz, responsable de Sanidad y Educación y Noelia Núñez, encargada del nuevo área de Movilización y Reto Digital.
Todos se han sumado a la nueva foto de familia, en la que figuran también Cuca Gamarra, como secretaria general, Carmen Fúnez como visecretaria de Organización, Elías Bendodo, responsable de Política Autonómica y Municipal y Análisis Electoral, Borja Sémper, oficializado como portavoz y al cargo de Cultura; y Esteban González Pons y Juan Bravo, que siguen como responsables de Institucional y Economía.
Dirigentes del PP que han acudido este jueves a Génova, como el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco; el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, o el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, han dado la bienvenida a los cambios con los que Feijóo ha rearmado su oposición a Sánchez.
Al Comité Ejecutivo Nacional no han acudido esta vez presidentes como el de Andalucía o la de la Comunidad de Madrid, Juanma Moreno e Isabel Díaz Ayuso, con agenda institucional en sus regiones.