La atípica moción de censura de Vox con Ramón Tamames de candidato sigue coleando en la política española, con todas las formaciones asegurando que salen vencedoras de los dos días de debate en el Congreso que no pasarán a la historia por su brillantez discursiva.
Sin embargo, la iniciativa de la ultraderecha ha animado la pugna política en plena precampaña de las elecciones municipales y autonómicas de mayo y ayer se siguieron produciendo reacciones al respecto. Cabe destacar la valoración tardía de un presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, que hasta el momento había guardado silencio y que durante la moción de censura se había ausentado llenando su agenda de actos de carácter internacional.
Ayer precisamente, el líder popular se encontraba en Bruselas donde, una vez fracasada la surrealista moción, ofreció una rueda de prensa para dar su opinión al respecto y defender que el PP no se equivocó con su abstención.
Feijóo, que fue muy duro contra la iniciativa de Vox y la calificó de “esperpéntica”, justificó no obstante la abstención del Grupo Popular alegando que tampoco pueden seguir una estrategia de “apuntalar” a Pedro Sánchez: “Tenemos nuestro propio camino y nuestra agenda”.
Este posicionamiento de los populares se lee de no enfadar a un partido con el que se van a ver obligados a pactar en decenas de instituciones, tanto municipales como autonómicas, tras los comicios del 28-M.
Más allá, el presidente del PP aseguró que su partido no se va a prestar a “este tipo de juegos” que “desprestigian” las instituciones. En esa línea, censuró la “política infantil y populista” que, a su juicio, se ha visualizado esta semana en el pleno del Congreso.
“Yo ofrezco una España normal y una política para adultos”, expresó en su comparecencia ante los medios tras asistir a la reunión del Partido Popular Europeo (PPE), previa al Consejo Europeo.
Feijóo considera que en el “espectáculo” de la moción ha quedado “claro” que hay “dos visiones distintas de la política” y añadió que en su visita a Bruselas sus “colegas” del PPE le han preguntado “en qué consistía este asunto” de la moción. “Es un espectáculo impropio vivido en el Congreso”, subrayó, para añadir que así se lo he explicado a los dirigentes europeos que le han preguntado.
Defiende su ausencia
Por otra parte, Núñez Feijóo justificó su ausencia de la Cámara Baja –podía haber acudido al pleno en calidad de senador– asegurando que no se va a prestar a “este tipo de juegos” que no piensan en el prestigio de las instituciones.
“No comparto esta forma de hacer política y, por tanto, me he abstraído de este esperpento que hemos vivido en nuestro país y me he dedicado a reforzar la alternativa, a reconstruir la imagen internacional de España y a hacer una política que es la que se merece España”, se explayó el jefe de la oposición.
Por otra parte, el líder del PP reprochó al presidente del Gobierno español que aprovechara su intervención para dar un “macro mitin” y que su vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, lo haya utilizado para “apropiarse” de Podemos.
Tras subrayar que la verdadera moción de censura será en las elecciones del 28 de mayo, Feijóo dijo que la mayoría de los españoles considera que esta iniciativa de Vox ha sido una “pérdida de tiempo” para insuflar aire a Sánchez.
“Es verdad que como estaba previsto, el señor Sánchez ha ganado otra votación parlamentaria, pero nosotros esperamos derrotarle en las urnas”, manifestó.
“España merece pasar página y rápido de estos cuatro años de frivolidad y populismo, mezclado con el independentismo, y volver a la política seria”, añadió, para recalcar que él “no va a vender a los españoles una arcadia feliz”, porque para eso “ya está el populismo actual”.