Feliz resaca del Día de San Sebastián

Todo acompañó. La lluvia de los días anteriores dio paso a una jornada fresquita, pero soleada, y las ganas de disfrutar después de dos años sin poder celebrar el Día de San Sebastián hicieron que este 20 de enero haya sido, si cabe, más especial para los donostiarras. El ambiente durante 24 horas resultó espectacular, miles de personas se echaron a la calle y los protagonistas disfrutaron al máximo, tal y como relatan –aún en pleno proceso de recuperación tras la fiesta– algunos protagonistas a NOTICIAS DE GIPUZKOA. La de este sábado ha sido una resaca feliz.

“Un día de lujo”

Patxi Ayestaran no pudo tener mejor estreno como tamborrero. “He disfrutado muchísimo. A la mañana fui a ver la Tamborrada Infantil, que salía mi hijo pequeño, luego me fui a casa y a la tarde fue mi turno”, comenta el donostiarra, que salió con La Anunciata, compañía que desfiló por Altza, Bidebieta e Intxaurrondo.

“Fue un día de lujo”, resume Patxi: “Lo pasamos muy bien todos los de la tamborrada, se notaba que la gente tenía ganas de disfrutar, nos lo pasamos genial y el año que viene repito, eso seguro”. Asegura que “se notaba que no se había podido celebrar la tamborrada los dos anteriores años, porque la gente se lo pasó bien, que era el objetivo”.

El día “se alargó” porque después de tocar los integrantes de la compañía se quedaron “a tomar algo”, así que el 21 de enero se dedicó a recuperar fuerzas. “Estoy un poco tocadete”, admite, “pero hoy se puede recuperar porque es festivo”.

Una larga juerga

También disfrutó de un día grande Mikel Fernández, que en su momento salió en la Tamborrada Infantil pero que no ha sido hasta este año cuando se ha estrenado con la de adultos, Xarmanta, que desfiló de 3.30 a 6.30 horas, en plena madrugada.

“Hasta el tiempo nos respetó. Nos cayeron un par de chaparrones pero el resto bien”, comenta Mikel, cuya fiesta empezó ya de víspera: “Siempre cenamos en Gros y vemos la izada en el Txofre. Luego fuimos a la Parte Viaja y a las 3.00 fuimos ya a prepararnos. Salimos a las 3.30 y acabamos casi a las 7.00. Luego aguantamos un ratillo más, porque justo salía después Kresala y les acompañamos un rato. Luego ya nos fuimos a casa”. El momento “más emocionante” fue tocar en la plaza de la Constitución: “Es distinto verlo que estar ahí arriba en el tablado”.

“Lo pasamos muy bien”, resume: “Había ilusión y la gente estaba volcada con la fiesta. Lo mejor de salir fue estar acompañado de los amigos. Formar parte de la fiesta es bonito, te da cierta sensación de orgullo”, comenta este vecino donostiarra, que ya tiene “guardado el barril en casa” con la idea de “volver a participar el año que viene”.

Un estreno "estupendo"

Una de las siete compañías que debutó en la fiesta fue Nordic Walking, que desfiló por la tarde en Amara. “Fue estupendo. Hizo buen tiempo y lo pasamos muy bien. La gente estaba animada y fue fenomenal”, cuenta, pasadas unas horas de la fiesta, la tambor mayor, Ana Martín.

Para los integrantes de esta tamborrada, la edición de 2023 es ya “inolvidable”: “El año pasado nos quedamos con la miel en los labios y en la ciudad en general se notó que llevábamos dos años sin salir. Fue un día inolvidable y estamos todos muy contentos de ser parte de la fiesta”. Dice incluso que están “con pena de tener que esperar un año entero para volver a disfrutar”.

El desfile de Nordic Walking acabó a las 20.45 horas, pero sus integrantes continuaron la fiesta. “Cuando acabamos, teníamos reserva para cenar y luego fuimos a la Arriada”, cuenta Ana, en otro momento también bonito del Día de San Sebastián: “Normalmente solemos estar pocos, pero esta vez estuvo a tope la Consti. Fue hasta complicado entrar”.

“La arriada, el colofón”

También estuvo en la arriada, en su caso como protagonista, Iñaki Lizarza, integrante de la Unión Artesana. Aunque antes de ese momento el día también tuvo su miga.

“El día en general fue muy bien, un exitazo. El 19 por la tarde salimos con la infantil y luego había cena en la sociedad”, comenta Iñaki. La juerga ya entrados en el día 20 se alargó. Por primera vez en esta sociedad de la Parte Vieja pusieron bar. “Tuvimos que echar a la gente a las cinco de la mañana”, dice riéndose: “No querían irse a casa”.

La Arriada resultó espectacular, “el colofón” del día para Iñaki: “Ya lo comentamos cuando estábamos ahí, que no recordábamos una Arriada con tanto ambiente. La plaza estaba llena y se notaba que había ganas. Lo disfrutamos”. Además, que hubiera representantes de la tamborrada infantil de la Unión Artesana, novedad este año, convirtió el acto en algo si cabe más “emotivo”.

Su resumen es que el Día de San Sebastián de 2023 ha sido “especial”: “Hubo un ambientazo, lo pasamos de maravilla. Se notaba que la gente estaba disfrutando, la verdad es que todo salió muy bien”.