Kaos Urbano puso anoche el cierre al Iruña Rock bien entrada la madrugada cuando restaban apenas unas campanadas para que el sol fastidiara la jarana al Navarra Arena. Desde su dentellada suburbial se zanjaba el latido de la música y empezaba el de la pelota: un ser vivo que grita, baila, se encabrita, traza obras de arte efímeras. Unai Laso y Ander Imaz se miden hoy a Aitor Elordi y José Javier Zabaleta en el escenario que unas horas antes era un avispero de altavoces y cabezas danzando entre riffs de guitarra y baquetazos enérgicos. Más de un centenar de operarios han trabajado durante toda la noche para poner de gala el frontón. La final del Campeonato de Parejas recala por primera vez en Nafarroa. Cuellos alzados, como Cantona. ¡Que siga el rock!
Los finalistas
Tendencias opuestas
Elordi y Zabaleta, con una liguilla de cuartos de final sideral, llegaron a las semifinales con la vitola de máximos favoritos al triunfo final. Hasta ese momento acumulaban doce victorias en catorce partidos. De exhibición en exhibición. En las semifinales, pese a comenzar entonados, el mallabitarra no estuvo a buen nivel en el segundo partido –ante Laso-Imaz encajaron una derrota por 22-19– y en el tercero, en el todo o nada ante Altuna III-Tolosa, fue el zaguero el que no funcionó como acostumbra por un problema estomacal. La lesión de Xabier les abre el camino a la final, aunque la duda ha salpicado una andadura de sobresaliente.
El caso de Laso e Imaz es inverso. Sin entrar finos en el campeonato y con graves problemas de manos del pelotari de Oiartzun, levantaron un 19-21 en el play-off ante Peio Etxeberria-Rezusta y llegan en su mejor momento a la final del Parejas. El delantero de Bizkarreta-Gerendiain volvió a disfrutar en el precedente del Labrit con un recital. Raíz radical. Los de Baiko suspendieron por mal de manos su tercer duelo de semifinales, pero, con una semana más de tranquilidad, no será excusa.
Las apuestas
A la par
Si bien el favoritismo de Elordi-Zabaleta sobre el resto de combinaciones ha sido patente durante todo el Parejas, las apuestas en el frontón saldrán igualadas. Fuentes consultadas por esta cabecera determinan que el dinero estará “a la par” aunque habrá cierta tendencia hacia los de Aspe.
El buen epílogo de campeonato de Laso e Imaz sube su cotización. No hay que echar demasiado la vista atrás para comprobar cómo estaban las cosas hace apenas dos fines de semana. El 18 de marzo, en la misma cita, se cantaron posturas de doble a sencillo por el vizcaino y el navarro. La película ha cambiado de pleno.
El palmarés
El reino de Aspe
Aspe posee el monopolio del Campeonato de Parejas, apenas roto en cinco ocasiones en los últimos veinte años. Titín III-Goñi III (2004), Martínez de Irujo-Goñi III (2005), Martínez de Irujo-Martínez de Eulate (2006), Xala-Martínez de Eulate (2007), Martínez de Irujo-Goñi III (2009), Xala-Zubieta (2010), Titín III-Merino II (2012), Martínez de Irujo-Zabaleta (2013), Martínez de Irujo-Barriola (2014), Irribarria-Rezusta (2017), Ezkurdia-Zabaleta (2018), Elezkano II-Rezusta (2019), Ezkurdia-Martija (2020), Elezkano II-Zabaleta (2021) y Altuna III-Martija (2022) engalanan las vitrinas de la operadora de Eibar.
Laso e Imaz aspiran a romper el gafe de Baiko Pilota. La promotora de Bilbao, antes Asegarce, lleva sin catar el torneo más largo del curso desde 2016, campaña en la que Olaizola II-Urrutikoetxea formaron pareja. Un año antes también conquistaron el cetro gracias a Bengoetxea VI-Untoria. En 2015, de hecho, los rivales en la final fueron de la misma firma: Berasaluze II y Zubieta –cedido por Aspe para el Parejas–.
La historia
Laso e Imaz, los octavos
Laso e Imaz es el octavo dueto en la historia que alcanza dos finales consecutivas. En los precedentes, las siete anteriores lograron, al menos, una txapela. Estos fueron: Onaindia y Urcelai II (1941 y 1943, ganaron las dos), Pierola y Maiz II (1978 y 1979, ganaron la primera), García Ariño y Maiz II (1980 y 1981, ganaron la primera), Bengoetxea IV y Maiz II (1982 y 1983, ganaron las dos), Bergara y Martinikorena (1984 y 1985, ganaron las dos), Titín III y Arretxe (1992 y 1993, ganaron la segunda) y Olaizola II y Mendizabal II (2008 y 2009, ganaron la primera).
El Navarra Arena
Rápido y pared rugosa
“Aquí se queda mucho el material”, desgrana Unai Laso sobre el frontón Navarra Arena. Los de Baiko tomaron la decisión de optar por “las pelotas más vivas” para contrarrestar las características de la cancha. “Estuvimos entrenando con pelotas bastante nuevas y se quedaron enseguida, o sea que será duro el partido”, valora el errotarra, quien remacha que “la pared izquierda es más áspera que otros frontones, agarra más. Tampoco creo que nos venga mal porque si le das ahí se puede desactivar el aire de Elordi”.
Con todo, el megalítico multiusos iruindarra está considerado un “frontón rápido” en el que “pesa mucho la pelota” en la zaga. Por tanto, si Zabaleta tiene pelota a placer, puede hacer estragos.
Las txapelas
Zabaleta, el único
Zabaleta es el único de los contendientes que sabe lo que es ganar una txapela del Parejas. Tiene tres (2013, 2018 y 2021). El 28 de abril se cumple una década desde la primera, que se llevó con Irujo. Berasaluze II se rompió el tendón de Aquiles con 4-6 en el luminoso y se tuvo que suspender el choque. Si gana la final, empata a cetros con Titín III, Errandonea y Goñi III.
Laso venció en el Manomanista de 2022; pero Aitor Elordi y Ander Imaz pueden estrenar sus vitrinas en Primera. Habrá nuevo campeón.