El mes pasado los bañistas asiduos a la Playa de Ondarreta se vieron sobresaltados por la aparición de una grieta en el muro de este arenal, bajo el Paseo Eduardo Chillida. La preocupación fue mayor todavía cuando supimos que existía "riesgo de desplome". Pues bien, un mes después el Ayuntamiento de Donostia ha anunciado que ya se ha subsanado la grieta.
Según informa el consistorio, ya han finalizado las obras que "se han prolongado durante 8 días ininterrumpidos, aprovechando las mareas vivas de finales de septiembre". Tal y como ha explicado el concejal de Mantenimiento Urbano, Carlos García, "al comenzar la reparación se observó que las mareas y el oleaje habían comenzado a descalzar la base del muro con posible riesgo de desplome, por lo que finalmente se ha optado por reforzar el tacón del mismo en un tramo de 60 metros de largo. Así, continuando el pretil ya existente se ha prolongado el mismo mediante el empleo de 90 m³ de hormigón armado."
Para la realización de esta obra, que ha contado con la supervisión de Costas, se han empleado 1 mini exvacadora, 1 mini dúmper y dos camiones. El coste de los trabajos realizados asciende a 65.000 euros.