La Agencia Nacional de Seguridad del Medicamento y Productos Sanitarios de Francia (ANSM) ha alertado sobre los peligros de una serie de medicamentos comunes para el resfriado. Se trata de los fármacos vasoconstrictores (pseudoefedrina) por vía oral que también se usan para tratar síntomas de alergias y gripes.
"Pueden ocurrir infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares después de usar medicamentos vasoconstrictores (pseudoefedrina) para aliviar los síntomas del resfriado", avisan desde la agencia. "El riesgo es muy bajo pero estos eventos pueden ocurrir independientemente de la dosis y la duración del tratamiento". Es por eso que las autoridades sanitarias francesas han desaconsejado su uso.
La EMA, contra la pseudoefedrina
El Comité de Seguridad de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) inició el pasado febrero una revisión de los medicamentos que contienen pseudoefedrina para investigar su posible vínculo con el síndrome de encefalopatía posterior reversible (PRES) y el síndrome de vasoconstricción cerebral reversible (RCVS), afecciones que afectan a los vasos sanguíneos del cerebro.
La pseudoefedrina se toma por vía oral y se utiliza sola o en combinación con otros medicamentos para tratar la congestión nasal (nariz tapada) provocada por un resfriado, gripe o alergia.
Algunos medicamentos que contienen pseudoefedrina se comercializan bajo diversos nombres comerciales, como 'Gelocatil Gripe con pseudoefedrina', 'Frenadol descongestivo 16 capsulas', 'Cinfatós descongestivo', 'Reactine cetirizina pseudoefedrina', 'Actifed', 'Aerinaze', 'Aspirin Complex', 'Clarinase', 'Humex rhume' y 'Nurofen Cold and Flu'.
La pseudoefedrina actúa estimulando las terminaciones nerviosas para que liberen la sustancia química noradrenalina, que hace que los vasos sanguíneos se contraigan (estrechen). De este modo se reduce la cantidad de líquido que liberan los vasos, con lo que disminuye la inflamación y la producción de mucosidad en la nariz.
Los medicamentos que contienen pseudoefedrina están autorizados en varios Estados miembros de la UE solos o en combinación con medicamentos para tratar los síntomas del resfriado y la gripe, como dolor de cabeza, fiebre y dolor, o la rinitis alérgica (inflamación de las fosas nasales) en personas con congestión nasal.