Francia quiere que la Comisión Europea utilice "de forma mucho más vigorosa" la normativa sobre las redes sociales contra las injerencias del magnate Elon Musk y si no lo hace que, en nombre del principio de subsidiaridad, permita que sean las autoridades francesas las que lo hagan.
"Si la Comisión Europea no sabe protegernos contra esas injerencias o esas amenazas de injerencias, tiene que dar a los Estados miembros, a Francia, la capacidad para protegerse por sí misma", subrayó el ministro francés de Exteriores, Jean-Noël Barrot, en una entrevista a la emisora 'France Inter'.
Recordó que desde hace un año está en vigor una nueva normativa europea que permite fuertes sanciones o incluso la suspensión de redes sociales en caso de ser utilizadas para injerencias políticas.
"El debate público", indicó, "no puede deslocalizarse, ni quedar desregulado en grandes plataformas de redes sociales propiedad de multimillonarios estadounidenses".
El ministro francés, que explicó que ha pedido al Ejecutivo comunitario que utilice ese dispositivo "de forma mucho más vigorosa", advirtió que si no lo hace tendrá que permitir que los Estados actúen por su cuenta, en nombre de la subsidiariedad.
Preguntado sobre si considera injerencias las declaraciones de Elon Musk contra el primer ministro británico, Keir Starmer, o contra el canciller alemán, Olaf Schoz, Barrot respondió que todo el mundo tiene derecho a tener sus propias opiniones, pero "cuando se participa en un Gobierno, sus opiniones tienen un valor particular".
Según su análisis, si el propietario de X y una de las personas más próximas a Donald Trump lo hace para crear un efecto de comunicación, es "extremadamente lamentable". Pero que si lo hace "asumiendo nuevas alianzas con partidos de ultraderecha como la AfD", entonces el Partido Republicano en Estados Unidos "tendrá que asumir" esas alianzas que, a su parecer, contradicen su historia.