La Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) informó este jueves de un fuerte incremento este año de los intentos de entrada por vía irregular en la Unión Europea (UE) en la región del Mediterráneo central, donde se duplicaron con creces respecto a 2022.
En un documento, Frontex repasa los movimientos en las fronteras exteriores de la Unión en lo que va de año e indica que, entre enero y julio de 2023, se frustraron 176.100 cruces irregulares, lo que supone un 13% más que en el mismo período del año pasado.
Según los datos de la agencia, la única región donde ha subido el número de intentos de entrar en la UE fue el Mediterráneo central, donde se detectaron más de 89.000 casos, un 115% más que en 2022.
El mayor descenso del número de intercepciones se registró en el Mediterráneo oriental, donde, entre enero y julio de este año, hubo 17.054 detenciones (un 29% menos que el año pasado), y en los Balcanes occidentales, región en la que se informó de un 26% menos de casos con respecto a 2022.
En julio de 2023, hubo casi 42.700 detecciones de cruces irregulares en las fronteras exteriores de la UE, que con un aumento interanual del 19% supone el mayor incremento desde marzo de 2016.
Por otra parte, Frontex colaboró con las autoridades nacionales en casi 21.000 devoluciones de inmigrantes que trataban de entrar en la UE de manera irregular; y fletó 16 vuelos internacionales en los que esas personas fueron deportadas a los países de origen.
La Agencia Europea de Fronteras mantiene un cuerpo de 19 agentes especializados en operaciones de retorno sobre el terreno en la isla de Chipre, y otros 11 en Italia, siendo estos dos los únicos lugares donde Frontex ha desplegado este tipo de funcionarios.
La Agencia Europea de Fronteras tiene como principal función coordinar la cooperación entre los Estados en la gestión de las fronteras exteriores, así como llevar a cabo intervenciones rápidas en situaciones de crisis.
La tragedia ocurrida el pasado 14 de junio, cuando unas 500 personas murieron al naufragar un barco que intentó llegar a las costas griegas ha reavivado las críticas sobre este organismo.