El Ayuntamiento de Donostia no elude la cuestión de la necesidad de hacer más transitables las aceras para las personas invidentes y con dificultades de movilidad. Es más, desde el Consistorio saben que es una de sus asignaturas pendientes, tal y como reconoce a este periódico el concejal de Vías Públicas, Miguel Ángel Díez.
“No hemos dado los pasos que teníamos que dar para hacer cumplir la ordenanza de hacer nuestras calles más transitables, pero garantizamos que estamos trabajando en ello y que vamos a tomar medidas”, asegura Díez, “incidiendo sobre todo en las calles más estrechas”.
Admite el concejal que la ordenanza no se ha puesto en vigor “por el covid”: “Está parada, pero hay que aplicarla. Hemos tenido transigencia con ciertas cuestiones y hay que tomar cartas en el asunto. Somos conscientes de que hay que dar el cambio”. Díez dice que “ciertos elementos como expositores o pizarras hay que intentar quitar porque no pueden perjudicar el tránsito. Parece que los comercios lo han tomado como algo habitual y hay que intentar ajustarlo. Son elementos que impiden el paso a las personas que van con bastón y se guían con la pared”.
El concejal de Vías Públicas dice que desde el Ayuntamiento donostiarra hay “buena disposición” para encontrar “un punto de encuentro para convivir todos, tanto el comercio como la movilidad”. Admite, eso sí, que “no es un tema sencillo porque a veces es difícil cumplir todos los requisitos”, por ejemplo, con los “aparcabicis”. También reconoce que hace falta invertir más en “cuestiones como accesibilidad en calles o viviendas. Es hora de tener más consideración”.