El arte y sus inabarcables formas de expresión en lo tangible y lo visible se hacen hueco en las fiestas de Algorta desde 2018, a través de uno de los cauces más inauditos. Los elementos: vehículos, sprays y aire libre. Esto es: artistas realizan grafitis en furgonetas, camiones, coches, caravanas… en la calle, en vivo y en directo, ante la curiosa mirada de los espectadores. Eso es AlgortaGraff y Asier Martiarena es quien está detrás de la organización de este curioso y colorido evento que ya divisa la siguiente parrilla de salida: será el próximo día 30 de este mes en el marco, de nuevo, de las celebraciones de San Ignacio.
Es una muestra de arte al instante en un soporte sugerente. Innovador. Original. Grafitis en coches. La obra viajante. “El camión va por ahí dando vueltas y le estás dando una oportunidad a los artistas de que se vea su trabajo en diferentes sitios, que sea más visible, vamos”, considera Asier. Además, este año habrá un Ford Sierra que compite en rallyes y que será decorado con lettering (el arte de dibujar letras, en lugar de simplemente escribirlas. Las letras se consideran una forma de arte, donde cada letra de una frase o cita actúa como una ilustración).
Los grafiteros agitan sus mentes creativas y sus manos obedecen en sintonía. “La temática es libre. Sí que es verdad que cuando llevé un camión de hípica, le dije a los chavales si podían hacer algo relacionado, lo aceptaron y el dueño se quedó muy contento. Pero, en general, yo les doy libertad para que hagan su propio trabajo. Libertad absoluta. Meto a dos artistas en cada vehículo e intento cuadrar que el rollo sea el mismo, que si uno hace realismo que el otro también y que no haya mezclas raras. Lo suyo es que quede bonito en conjunto”, comenta el getxotarra, que también es artista y deja su huella en murales para diversos establecimientos.
Los propietarios de las furgonetas o camiones están perfectamente informados de todo, como no podía ser de otra manera. De hecho, ellos ceden sus vehículos. “La gente que tiene la furgo más dañada o vieja la puede decorar gratuitamente”, señala Asier. Es la otra cara de AlgortaGraff, esa iniciativa que la cabeza de un entonces pequeño Asier dibujó en 1998 cuando vio un evento de grafitis al lado de la calle Zabala. Pensó que él impulsaría otro en el futuro. Y así lo hizo veinte años después. “La primera vez se pintaban paneles de madera entre diferentes artistas, pero ya el siguiente año estuve hablando con la comisión de fiestas y les propuse meter camiones, porque el panel va a la basura y el camión se mueve por ahí”, recuerda. El lienzo móvil. Ya están rugiendo los motores para la tercera edición de AlgortaGraff.