El bailarín y coreógrafo israelí Gil Kerer abrió este sábado a las 20.00 horas la primera jornada del festival Danzad, Danzad Malditos, que arrancó en el Caballo Blanco con su pieza Concerto for Mandolin and Strings in C Major by Vivaldi. Una danza adulta, juvenil, infantil, con la música y la danza como celebración, espacio de libertad y sencillez. Kerer interpretó su espectáculo en el marco de un festival que tras dos años de pandemia recupera su esencia itinerante, y que se extenderá durante los tres primeros sábados de agosto con programaciones de danza y parkour con el objetivo de acercar el arte y la cultura a la ciudadanía.
Cultura