La A-15 se cerrará al tráfico en Gipuzkoa cuando las alertas por nieve sean por debajo de los 700 metros. Así lo ha indicado este miércoles la diputada de Infraestructuras Viarias, Aintzane Oiarbide, que ha desgranado las principales medidas del plan de vialidad invernal 2022-2023, que estará en vigor entre el 15 de noviembre y el 15 de abril y contará con un presupuesto de 4,8 millones de euros.
Según ha explicado la responsable foral de carreteras, al igual que sucedió el pasado año, las obras en los túneles de la Autovía de Leitzaran van a obligar a esta medida. Concretamente, a partir de enero, la Diputación comenzará con las obras de refuerzo de revestimiento y adecuación de instalaciones de los túneles de Oindolar y Gorosmendi, y "ante la imposibilidad de transitar por los desvíos de tráfico con los camiones quitanieves, se repetirán las medidas del año pasado", ha indicado Oiarbide. Estas medidas no se tomarán hasta que comience la renovación de los dos túneles, que prevemos será a partir de enero. Una vez comenzados los trabajos, tal como sucedió con las obras de Belabieta, también se cerrarán por completo, para todos los vehículos, ambas calzadas, entre el enlace de Berastegi y el enlace de Andoain, siempre que las alertas de Euskalmet anuncien nieve por debajo de los 700 metros”, ha añadido.
No obstante, ha explicado que las restricciones en la circulación estarán debidamente anunciadas y se habilitarán vías alternativas: "Se podrá recibir información puntual en la cuenta de Telegram ELURRA A-15 NIEVE que ya habilitamos para este fin durante el plan invernal pasado. Si se cierra la autovía, se coordinará con los equipos de Navarra el desvío del tráfico por otros itinerarios. Además, se prohibirá la circulación de camiones de paso por la GI-2130 colocando señales verticales y se coordinará con Tráfico para que este corte sea efectivo”. La calzada sentido Andoain-Iruña se cortará en Andoain, no permitiéndose el acceso de ningún vehículo. La calzada en sentido Iruña-Andoain se estrechará a un carril en las proximidades del enlace de Berastegi, acabando por un desvío de los vehículos hacia el enlace, donde la Ertzaintza hará una discriminación de vehículos redirigiendo hacia Navarra, por la A-15, a los vehículos pesados.
Oiarbide ha precisado que el plan para este invierno estará dotado de 87 camiones quitanieves, así como 11.400 toneladas de sal repartidas en 39 depósitos. Asimismo, se dispondrá de las grúas de gran capacidad que dispone el Gobierno Vasco en la N-I y la A-15, que se emplearán en el caso de que algún vehículo pesado obstaculizara la carretera.
La finalidad del plan de vialidad es "mantener la red de carreteras del territorio en condiciones adecuadas, libres de hielo y nieve", para lo cual contará dos centros principales: el de Bergara, abierto el año pasado y que atenderá las necesidades de la AP-1 y A-636, y el de Arroa-Zumaia, inaugurado en 2020 y que dará servicio a la AP-8. Pese a contar con los recursos para evitar problemas viarios en situaciones de alerta meteorológica, Oiarbide ha recordado que "en condiciones meteorológicas muy adversas, conviene evitar coger el coche y si ello no es posible, asegurarse de tener el vehículo en buen estado y con los recursos adecuados”. Asimismo, ha recordado que “cuando la carretera está en mal estado es conveniente dejar despejado el carril izquierdo para que las máquinas quitanieves y los vehículos de emergencia puedan hacer su trabajo”.