'Haíto', entrenador de Zuazo Barakaldo: “No descender es más complicado que el ascenso”

La División de Honor femenina de balonmano retoma este fin de semana al actividad después de que durante el último se jugara la Supercopa Ibérica en la ciudad portuguesa de Maia. De ella salió vencedor el Bera Bera donostiarra, que vuelve a ser fiel a su condición de favorito y suma un nuevo trofeo que sigue empequeñeciendo sus pobladas vitrinas.

Las de Imanol Álvarez no tuvieron piedad del Madeira en semifinales y tampoco del Elche en la final. El 28-19 endosado a las alicantinas sirvió para tomarse cumplida revancha de aquella de aquel adverso 28-23 que se vivió, también en la Supercopa cuando solo era formato estatal, allá por 2021 en Torrelavega.

Las donostiarras, que en breve acometerán su reentrée europea, ya se encuentran en modo on para intentar abordar un triplete que durante el curso pasado no se resistió. Avatares de un sistema de competición con play-offs que ha permitido los dos últimos años que el campeón de Liga no haya sido el campeón de la Liga regular.

El primer derbi del ejercicio ya tuvo lugar durante la jornada inaugural, con victoria guipuzcoana en el Hermanos Induráin de Villava. El 23-35 infligido al Beti Onak supuso el único triunfo de nuestra representación, ya que Zuazo Barakaldo cedió claramente en su viaje a Galicia. Un 32-19 endosado por el Porriño, que en principio vuelve a ser uno de los gallos del campeonato.

La segunda jornada depara el duelo Bera Bera-Valladolid para este sábado a las cinco y media de la tarde en el Josean Gasca. Justo cuando acabe, hora y media más tarde, llegarán el Gijón-Beti Onak en el polideportivo de La Arena y el Zuazo-Elda que va a significar la puesta de largo de Lasesarre otra vez al máximo nivel tras el paréntesis de un año en Primera, una vez la fase vivida en Lanzarote resultó plenamente provechosa para las vizcaínas.

Objetivo no descender

La afición baracaldesa vuelve a disfrutar de su equipo con los mejores, y el desafío radica, como no puede ser de otro modo, en sustanciar una permanencia en la élite que las navarras que dirige Miguel Etxeberria consiguieron con todo merecimiento en primavera.

Joseba Rodríguez, ‘Haíto’, un año más, y van siete, al frente de la escuadra de la Margen Izquierda, habla en ONDA VASCA de que “entrenando en Trapaga noté la necesidad de cambiar de aires tras ocho temporadas. Aquí no, porque hay una renovación constante de jugadoras”.

Haíto destaca que “está clarísimo que no descender es más complicado que el ascenso. El año pasado mantuvimos el bloque y en este hemos tenido siete incorporaciones, y eso es un añadido que suma en tu contra”.

“El último clasificado desciende directamente y del 10 al 13 juegan el play-down. Va a ser complicado contra el Elda. Ya tenemos el calendario en rojo porque es uno de los llamados a estar en la parte baja. Va a ser difícil, y los tres que hemos subido, con Logroño y Morvedre, somos los tres favoritos para bajar. A medida que vayan pasando las jornadas se va a ver un mejor Zuazo”, ha subrayado el técnico en la conversación mantenida con José Manuel Monje en ‘La Movida Deportiva’.

El máximo responsable deportivo de la vizcaínas tiene muy claro que "el tema de la afición es un tema pendiente de este equipo y de este deporte en general. En Zuazo tenemos una afición muy pequeña, casi todos son padres, amigos, familiares, pero no somos capaces de atraer a gente nueva. Pero, sobre todo, no somos capaces de que una población como Barakaldo de 100.000 habitantes no seamos capaces de atraer a 1.000. Somos pocos pero bien avenidos. Además el club tiene otras urgencias, sobre todo a nivel económico y si eso se mejora, ojalá el área social vaya en aumento".