El Movimiento de Resistencia Islámica Hamás ha asegurado este lunes que está mostrando "flexibilidad" en los esfuerzos para relanzar las conversaciones con Israel para iniciar la segunda fase del alto el fuego en la Franja de Gaza, obstaculizadas tras la exigencia israelí de prorrogar la primera fase, algo no contemplado en un inicio.
"Hemos abordado con flexibilidad los esfuerzos de los mediadores, Qatar, Egipto y Estados Unidos, y el enviado de Trump y estamos esperando los resultados de las negociaciones y la obligación de la ocupación a mostrarse de acuerdo y avanzar a la segunda fase", ha dicho el portavoz del grupo islamista, Abdulatif al Qanu.
Contactos fundamentados en finalizar la guerra
Así, ha recalcado que todos estos contactos "están fundamentados en poner fin a la guerra, la retirada (de las tropas israelíes de Gaza) y la reconstrucción" del enclave palestino, tras la destrucción causada por la ofensiva lanzada por Israel en respuesta a los ataques ejecutados el 7 de octubre de 2023 por Hamás y otras facciones armadas palestinas.
"Hemos mostrado un compromiso total con la primera fase del acuerdo y nuestra prioridad es lograr refugio y ayuda a nuestro pueblo, así como garantizar un alto el fuego permanente", ha manifestado Al Qanu, en referencia a los puntos que deben ser puestos en marcha en el marco de la segunda fase de los contactos con Israel.
En este sentido, ha confirmado que Hamás "ha dado su acuerdo a la propuesta de Egipto para crear un comité de apoyo que iniciaría su trabajo en la Franja para reforzar la resiliencia de los palestinos y lograr que se restablezcan en su tierra", tal y como ha recogido el diario palestino 'Filastin'.
Al Qanu ha criticado además a Israel por cortar la entrada de ayuda humanitaria y suspender el servicio eléctrico en el enclave y ha dicho que el objetivo es "reforzar el cerco" para "forzar a la población a emigrar", en referencia a los intentos para lograr el desplazamiento forzoso de población de Gaza, algo que ha descrito como "castillos en el aire".
"Las afirmaciones por parte de la ocupación sobre planes militares para reiniciar los combates en Gaza y la decisión de cortar la electricidad son opciones que han fracasado y que suponen una amenaza para los prisioneros, quienes no serán liberados si no es a través de negociaciones", ha zanjado.