El problema no es nuevo. Aunque durante el año 2023 con la incorporación de nuevos efectivos la Jefatura de Tráfico de Gipuzkoa había conseguido poner al día los plazos para los exámenes del carnet de conducir, las viejas pesadillas han vuelto. La Asociación de Autoescuelas de Gipuzkoa denuncia que, de nuevo, el número de examinadores en Gipuzkoa se ha reducido y con ello, ha aumentado el plazo para los alumnos que quieren presentarse a la prueba práctica.
¿Qué es lo que ocurre? En Onda Vasca se lo hemos preguntado a Arantxa Bravo, responsable de la Autoescuela Bidebieta y miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Autoescuelas de Gipuzkoa. "Es un déficit de hace muchos años. Siempre estamos parcheando pero hay cosas estructurales que hay que plantearlas de otra manera".
Durante los últimos meses, 6 de los 12 examinadores que trabajaban en Gipuzkoa han pedido un cambio de destino y se ha pasado de realizar 120 pruebas prácticas al día a hacer la mitad. "Estamos preocupados por el parón que se va a generar y estamos dando explicaciones a los alumnos, padres y madres", explica Arantxa Bravo.
La responsable de la Autoescuela Bidebieta afirma que el plazo para obtener el carnet de conducir estaba siendo de unos tres meses pero lamenta que ahora "no hay un plazo estimado" para realizar el examen práctico y "cada caso es particular". Advierte de que "en Gipuzkoa con el volumen de alumnos y personas en edad de sacarse el permiso de conducir que tenemos ahora, este es un perjuicio económico muy grande para familias y centros" de formación. "Nos vemos obligados a paralizar a los alumnos y darles las opciones según nos las da a nosotros la Jefatura de Tráfico".
"Falta una plantilla sólida de examinadores en Gipuzkoa"
Ante los micrófonos de Onda Vasca, Arantxa Bravo nos ha explicado que "durante un año hemos estado francamente bien con los plazos porque ha venido gente de otras provincias, examinadores itinerantes que, lógicamente, buscan, cuando tienen la oportunidad, acercarse a plazas más cercanas a su domicilio". Por eso, destaca Bravo, el problema que hay en Gipuzkoa es que "no tenemos una plantilla sólida, con su lugar de residencia, con sus familias y con su arraigo aquí" y, añade, "dependemos de lo que nos van trayendo".
Asegura Bravo que este problema ni es nuevo ni es exclusivo de Gipuzkoa, que hay otras jefaturas de Tráfico con falta de personal, pero que la Asociación de Autoescuelas de Gipuzkoa lo que reclama es resolver este problema porque "si vamos a estar ahora otros tres o cuatro meses hasta que nos pongan una solución, con la mitad de la plantilla vamos a acumular otra vez la bolsa de alumnos" que esperan para realizar la prueba práctica. Una bolsa en la que ya figuran más de 4.000 aspirantes que han pasado el examen teórico y esperan una cita para realizar el práctico.