Joseba López rubricó el pasado mes de septiembre su firma como corredor profesional del Caja Rural-Seguros RGA. El broche de oro a una temporada brillante, en la que conquistó el Campeonato de España sub-23, pero, sobre todo, un premio a su sacrificio realizado desde años atrás. Es así como el joven ciclista, nacido hace 22 años en la localidad guipuzcoana de Arrasate pero criado en Gasteiz, atiende la llamada de NOTICIAS DE ÁLAVA y valora sobre su salto a profesionales, un sueño que tenía marcado desde que dio sus primeras pedaladas.
Sus reflexiones dejan entrever un ciclista maduro y entusiasmado ante los nuevos desafíos que se le presentan. “Lógicamente te sientes muy satisfecho, has cumplido un sueño. Al principio cuesta darse cuenta de lo que has conseguido pero después sientes que has logrado un objetivo y hay que seguir progresando como en los últimos años”, relata Joseba López respecto a sus primeras sensaciones cuando dio el salto de manera oficial al primer equipo navarro.
En este sentido, el ciclista alavés recuerda que su temporada en el filial del Caja Rural ha sido especialmente regular. Una trayectoria sin contratiempos y en la que, además, ha alzado varios trofeos al cielo: “Al conquistar el Campeonato de España sabes que has ganado ciertas papeletas pero obviamente todavía me quedaba trabajo por realizar. El equipo profesional te quiere probar como stagier y al hacer esas pruebas ellos confirman si vales o no. Es cierto que te pones nervioso porque quieres respuestas pero te trasladan confianza y tranquilidad. En septiembre me dijeron que tenían un hueco para mí y el firmar tu primer contrato profesional es un momento muy especial. A profesionales llegan muy pocos”.
De este modo, durante varias semanas entre agosto y septiembre, Joseba López formó parte del stage con los profesionales tanto en la Volta Portugal y en el Tour de Luxemburgo. Una primera toma de contacto con los corredores profesionales en la que, de hecho, no desentonó. “Fue una etapa emocionante, conseguí un sueño que era correr con los mayores pero es duro porque tienes que aprovechar tu momento y tienes que darlo todo en ese momento clave; con cualquier detalle se puede torcer la historia. Venía muy fuerte y me adapté muy bien. Es cierto que en Luxemburgo lo pasé peor porque era final de temporada pero me desenvolví muy bien”, rememora el corredor alavés.
Con los pies en el suelo
No en vano, López asegura que su buen hacer durante el verano le brindó la oportunidad de ponerse a prueba con el primer equipo: “La clave ha sido la regularidad pero no solo durante esta temporada. Durante toda mi etapa como sub-23 la he tenido y este año se han sumado los buenos resultados entre junio y julio. Volé en Tolosa y en el Campeonato estatal, en la Vuelta a Madrid también estuve muy cerca del podio y en esos dos meses se me abrieron las puertas como mínimo para que los de arriba se fijaran en mí y que me diesen la oportunidad”.
Pese a que haya logrado todo un hito como es el de dar el salto a profesionales, López mantiene los pies en el suelo. “Mi rol durante el primer año es el de adaptarme a la categoría, seguir progresando y hacerme un corredor tanto de equipo pero al que le vayan las carreras duras. Hay que ir paso a paso y con los pies en el suelo. La clave está en adaptarme a la categoría lo antes posible y en ese aspecto es donde vamos a trabajar especialmente. Tengo un contrato de dos años en Caja Rural y eso mismo me da cierta tranquilidad ”, añade el ciclista del Caja-Rural respecto a cómo ve su próxima temporada.
Finalmente, Joseba López no esconde su deseo de correr ante el público euskaldun en la Itzulia: “Me encantaría participar en la Itzulia, es la carrera de casa. Me gustan mucho los cinco monumentos del ciclismo –Milán-San Remo, Tour de Flandes, París-Roubaix, Lieja-Bastoña-Lieja y el Giro de Lombardía–. Sí que te lo imaginas cuando vas a verles, imaginarte estar ahí, que toda la gente te mire al bajar del bus y que la gente te conozca. Pasar por los puertos como profesional y el aliento de la afición tiene que ser increíble”.