Un menor de 17 años tuvo que ser ingresado en el hospital Virgen Macarena de Sevilla tras recibir dos puñetazos en la cara y una patada en la cabeza que lo dejó inconsciente al final de un partido de fútbol en Villaverde del Río (Sevilla), por parte, presuntamente, de otro jugador del equipo contrario.
Los hechos, según han informado a EFE fuentes de la investigación, se produjeron el pasado sábado al final del encuentro de juveniles entre el Juventud Deportiva Bormujos y la Unión Deportiva Villaverde, equipo local, cuando el menor se dirigía al vestuario y sufrió la citada agresión que lo dejó inconsciente en el suelo.
El joven fue atendido en el mismo estadio por el 061, que lo derivó al hospital sevillano, donde estuvo en observación hasta la madrugada, y al día siguiente la familia interpuso una denuncia ante la Guardia Civil de San Juan de Aznalfarache.
El equipo del menor agredido ha emitido un comunicado en el que califica de "incomprensible que esto siga sucediendo", que "unos chavales de 16-17 años tengan que ver este tipo de actos", y critica que "el árbitro del encuentro se vaya sin dejar nada reflejado en el acta y sin ni siquiera interesarse por lo ocurrido en ese momento".
En referencia al presunto agresor, confía en que "tenga su castigo, y que la Federación tome las medidas que crean oportunas para que este tipo de actos no vuelvan a suceder".
El equipo local, por su parte, ha dicho que velará "por la seguridad del juego, y se tomarán las medidas pertinentes para evitar y denunciar estos hechos que empañan este bonito deporte".